jueves, 30 de agosto de 2007

El partido horrible con el que empezó todo

Calderón supera a Gomis durante el partido amistoso entre España y Francia- EFE

Parecía un jugador más del grupo francés, un conjunto de mucho músculo, más salto y sobrado de genio. Apenas había destacado en el Eurobasket de Belgrado, pero aquella tarde de domingo de hace casi dos años Tony Parker (Brujas, Bélgica, 1982) no defraudó. Más bien demostró por qué acababa de ganar su segundo anillo con los Spurs. Autor de 24 puntos, Parker fue el exquisito líder de Francia hacia la medalla de Francia (68-98). El protagonista de la última derrota de España y del fin del breve período de Mario Pesquera como seleccionador. Parker, sin querer, había sido el responsable de la renovación de la selección española, que doce meses después, con Pepu Hernández, ganaría el oro en Japón.

España no había superado el triple surrealista de Dirk Nowitzski en semifinales. Tampoco que Pau Gasol renunciase a participar en el torneo. Y no jugó. "Difícil recordar un partido en el que se tomaran menos notas en el último cuarto", resumía en La Vanguardia Juan Antonio Casanova, JAC, alguien que lleva más de 30 años siguiendo a España. Al equipo le faltó agresividad (25 rebotes por 41 del rival, que lanzó 28 tiros más). Había sido muy vulgar.

Pau, comentarista

"Es una lástima, es una lástima...", se cansaba de repetir Pau Gasol en TVE 1. Había vivido la frustración a unos metros, con un micrófono y sin poder hacer nada para ayudar a sus compañeros. No sospechaba el ala-pívot de los Grizzlies que con ese traspiés, tras aquella exhibición de Parker nacía la España campeona mundo. Una semana después, Pepu Hernández, era nombrado nuevo seleccionador.

Ahora España acumula 26 partidos invicta. Siempre anota, al menos, 70 puntos. Siempre se exige más. Si Pau Gasol no llega a una asistencia voladora de Mumbrú se enfada. Si Juan Carlos Navarro no puede jugar por unas molestias, Rudy Fernández -gran fase de preperación la del escolta del DKV- le suple con 16 puntos. Si a Jorge Garbajosa finalmente no le dejan disputar el Europeo de Madrid, ahí está Jordi Trias, discreto trabajador que selecciona bien sus tiros.

"Necesitábamos una prueba así, jugar y ganar a un equipo muy físico como Francia, que imprima tanta velocidad", analiza Pepu tras la victoria en el último amistoso antes de la competición continental (87-72). Está satisfecho de lo que ha visto. La conexión entre los pívots es buena, aunque no se cogen algunos rebotes decisivos. Y la inspiración de los jugadores desde lejos es decisiva.

Cuando el rival se acerca en el marcador (50-45, minuto 25), a España le bastan contras rápidas -no faltan las estéticas- y una colección de triples para cambiarlo todo. Dos lanzamientos de 6'25 de Calderón y uno de Berni y Jiménez allanan el triunfo (64-52, minuto 29).

No se vino abajo Francia, que tiene un grupo físico, aunque con poco talento para anotar (27 de 66 en tiros de dos). Tiene jugadores casi inéditos en sus equipos, como Florent Pietrus, o demasiado irregulares como Weis o Gomis. Cuenta con oportunismo, Ferchaud, y clase con Diaw y, especialmente, con Parker.

Por el rendimiento del actual MVP de la final de la NBA pasan casi todas las opciones de Francia en el Europeo. España es otra cosa. Pau Gasol es la estrella y por eso Pepu le hace acabar los amistosos, para que esté rodado. Todos asumen su rol. Unos, el liderazgo. Otros, que en cualquier momento tendrán su oportunidad. La derrota en Belgrado parece prehistórica, pero con aquel partido horrible con el que empezó todo.

No hay comentarios :