domingo, 5 de diciembre de 2010

Lakovic se queda a las puertas de rescatar a un Barça muy flojo en Vistalegre

Ellis intenta robarle la pelota a Lakovic -EFE.

A veces los gestos son tan elocuentes y significativos que describen mejor qué está sucediendo que las propias palabras. O que las propias jugadas si hablamos de baloncesto. Ahí teníamos a Jaka Lakovic yéndose al banquillo del Palacio de Vistalegre enfadado con el mundo, fuera de sus casillas, incapaz de dejar de hacer aspavientos porque le acaban de pitar una persona que él consideraba injusta y también le habían castigado con una técnica por sus protestas. Una actitud impulsiva, llena de frustración, que reflejaba la debilidad del Barça, desconectado por completo en una primera parte en la que sólo anotó 24 puntos y llegó a ceder por 18 (33-15 a los 15m 27s) ante el Asefa Estudiantes. Un panorama que Lakovic sufrió sin poder hacer nada, castigado por Xavi Pascual casi un cuarto y medio. Una decisión que motivó aún más al jugador esloveno, que en su primera oportunidad completó un dos más uno y asumió el liderazgo, tanto como para ser el principal responsable de que los azulgrana recuperasen 12 puntos en contra en el último período con cinco puntos de sus 18 puntos (4/9 en triples) en los últimos 14 segundos, un triple que forzaba la prórroga a 5’2s. Pero Amorós consideró que Erazem Lorbek había cometido personal sobre Nik Caner-Medley, el mejor de los locales con 12 puntos, que hizo lo que marca el manual: anotar el primero y fallar el segundo. Los azulgrana perdieron por 63-62 el tercer partido de la temporada en la Liga ACB, el mismo balance que en toda la fase regular del año pasado, y continúan a un triunfo del líder –ahora colíder–, el Caja Laboral, perdedor en Sevilla ante el Cajasol (91-71) y alcanzado por el Real Madrid, que ganó al Unicaja por 88-72 con 18 puntos y 11 rebotes de Felipe Reyes.  

Al Barça estuvo a punto de bastarle un último período muy serio, nada que ver con su actuación hasta entonces, para rozar un triunfo en un partido repleto de errores, lamentos y polémica. Los azulgrana por fin jugaron por fin con convicción y fiabilidad e incluso perdonaron, como en un par de penetraciones de Joe Ingles (ocho puntos, 2/9), que escogió la opción más enrevesada para tirar. El Barça, tan certero y concreto el curso pasado y al inicio de éste, se está convirtiendo en un conjunto inestable y que va por rachas, en parte por las bajas que atesora. Este lunes se sabrá cuándo se le realiza la otoscopia en Miami a Pete Mickeal, que necesitará al menos dos meses para recuperarse en Barcelona. La semana que viene Juan Carlos Navarro de la pequeña operación por una discopatía que arrastra desde hace años y a Gianluca Basile le restan, como mínimo, dos meses de recuperación.

Triples sin criterio

Lastrado por la ausencia de los tiradores, la opción normal hubiese sido que el Barça sacase más provecho del habitual a sus jugadores interiores, como había hecho ante el Cholet, aunque el conjunto francés fuese tan atípico que no contase con un pívot puro en su plantilla. Ante el Asefa Estudiantes olvidó a sus hombres altos en la primera parte, donde lanzó sin criterio ni remedio hasta 13 triples (con dos aciertos, 7/28 al final) ante un conjunto de Luis Casimiro que lanzó 23 de sus 35 tiros libres en los dos primeros cuartos. 15 de los 39 del conjunto estudiantil llegaron desde la línea de personal y cuatro fueron gracias a dos técnicas, pues a la de Lakovic le precedió otra de Boniface Ndong, tan errático como Lorbek. Ambos aportaron sólo dos y cinco puntos, respectivamente, y llegaron en el último período. Antes el equipo había buscado sin éxito a Kosta Perovic en un partido que funcionaba como bucle protagonizado por dos equipos que parecían competir por quién era capaz de errar la situación más sencilla. Los azulgrana le sumaron su obsesión por tirar desde más allá de 6’75 metros: Lorbek (1/4), Ingles (1/5)… Y Ricky Rubio, el único eliminado del encuentro, 0/5. El base del Masnou fue tan irregular como su equipo y a penas tuvo unos instantes de brillantez antes del descanso.

La entrada de Lakovic, la garra de Roger Grimau y el atrevimiento de Víctor Sada hicieron que los azulgrana rebajasen a ocho puntos la desventaja en el tercer cuarto. En el último cuarto les faltó muy poco para llevarse un triunfo impensable en un ejercicio rematadamente malo.  

Asefa Estudiantes (18+21+10+14) 63: Ellis (5), Asselin (4), Welsch (10), Granger (2) y Caner-Medley (12) –equipo inicial–, Oliver (9), Clark (4), Jasen (6), Gabriel (4) y Sánchez (7). Barça (11+13+15+23) 62: Rubio (4), Vázquez (6), Ingles (8), Lorbek (5) y Grimau (8) –equipo inicial–, Sada (5), Lakovic (18), Perovic (4), Ndong (2) y Morris (2).

2 comentarios :

jairo F.Quindós dijo...

sin duda un resultado sorprendente

Toni Delgado dijo...

El Barça jugó rematadamente mal e incluso así casi remonta. ¡Un saludo!