domingo, 12 de agosto de 2012

Ruth Beitia se queda sin medalla tras el mejor día de Barrett y Shkolina

La saltadora cántabra, cuarta pese a superar los dos metros y ver cómo sus rivales lograban marca personal en un concurso que dominó la favorita, Chicherova   


Ruth Beitia se lamenta de un fallo durante la final - Reuters. 

Saltó la barrera de los dos metros a la primera, era la primera vez que lo conseguía en “una gran competición” y pretendía superar los 2.03 a la tercera. Se quedó a medio camino y apartó el listón con la mano. Ahí acababa el concurso y la experiencia en los Juegos Olímpicos para Ruth Beitia (Santander, 1979), cuarta y sin medalla ante el ímpetu de Barrett, plata, y de Shkolina, que superaron los 2.03 metros, marca personal para ambas. Con un fallo con los 1.97, Beitia hubiese sido bronce igualmente aunque la rusa Shkolina hubiese fallado, pues llevaba una final limpia hasta entonces. La rival virtual era Barrett, que se volvió loca tras superar el listón en 2.03 en su segundo intento –lo que le valió la plata, Shkolina fue bronce en un concurso que ganó la favorita, Chicherova, con 2.05–, ahí donde se quedó Beitia, la capitana del conjunto español de atletismo: “Mi felicidad es un poco agridulce. Me llevo la medalla de chocolate, que me voy a comer seguro”. 

Intentó ponerse un punto alegre a un momento duro para ella, que llegaba confiada, después de haberse clasificado para la final sin fallo alguno y sobre todo tras saldar su deuda personal colgándose su primer oro en los Campeonatos de Europa de Helsinki de junio. Entonces le valió con saltar 1.97 a la tercera. Cinco centímetros más hubiese tenía que saltar en Londres, donde acabó agradeciéndole el apoyo a su entorno y a su entrenador Ramón Torralbo, que la dirige desde hace 22 años y de quien dijo de que es “mi 50%” en la pista. 

Hasta el error en 1.97, que superó a la segunda, Beitia tuvo una final impecable: 1.89 y 1.93 a la primera, como los 2 metros, mientras rivales como el resto de rivales se iban descartando solas: Tregaro, Gordeeva y Melfort se quedaban en 1.97, que Lowe superó a la segunda y Radlivil a la tercera. Ambas se quedaron en los dos metros, como la tenaz Hellebaut, con lo que quedaban cuatro saltadoras para repartirse las medallas. Chicherova aprovechó la ausencia de Blanka Vlasic ni Antonietta Di, lesionadas –14 meses llevaba entre algodones Ariane Friedrich, eliminada en la calificación– para cumplir las expectativas y estar perfecta hasta los 2.05, que saltó a la segunda. Una barrera insalvable para Barrett y Shkolina, que tuvieran que tener el mejor día de su carrera para batir a Ruth Beitia, a punto de decir adiós a la competición y que vivió su última gran final antes del adiós: “He visto la medalla ahí porque en ningún momento pensé que la americana [de sólo 21 años] podía saltar 2.03”. Pero lo hizo.

No hay comentarios :