domingo, 18 de noviembre de 2012

Entre el valor de Pounds y el desparpajo de Ortiz

El Tintos de Toro vence por 63-75 al UNB Obenasa tras remontar 14 puntos de desventaja

Asurmendi bota el balón ante Mariona Ortiz, en una imagen de archivo - FEB. 

Tiene cara de adolescente y un físico privilegiado para jugar a baloncesto: brazos largos, piernas finas y altura –mide 1'81–. Pero sobre todo Mariona Ortiz (Calella, 1992) es desparpajo. Sabe qué es ganar levantar muchos trofeos, pues forma parte de la exitosa generación que nació el año de los Juegos Olímpicos de Barcelona, del eterno del Dream Team, el oro de Fermín Cacho y el despertar del deporte español. Formada en el Platges de Mataró, esta base catalana que debutó en Liga con el Uni Girona suma cuatro oros en Europeos (dos con la U20, y uno con la U16 y la U18), además de dos platas (una europea con la U18 y otra mundial con la U19). Aunque el metal que ha hecho crecer más a Mariona Ortiz fue el que se colgó este verano con la U20 en Debrecen (Hungría), donde, además, fue escogida en el quinteto ideal y se sintió mejor que nunca gracias a la confianza que le dio Anna Caula. Así, imparable, se mostró la base titular del Tintos de Toro Caja Rural (CD Zamarat) en su visita al UNB Obenasa. Bajo la batuta de Mariona Ortiz (13 puntos, tres rebotes y cuatro asistencias y otros tantos robos) y la fiabilidad de Pounds (24 puntos) las visitantes se repusieron de su difícil comienzo (33-19 a los 14m 30s) y se pusieron por delante en el ecuador del tercer cuarto, y ya no cedieron hasta ganar por 63-75.

No se vino abajo el CD Zamarat, triturado al inicio por la puntería y trabajo de Putnina             –acabó con 16 puntos y otros tantos rebotes–, y la movilidad de Asurmendi y de Laura Herrera. Pounds era la más efectiva en el conjunto de Juan de Mena, sorprendido por la caraja de Denson y sobre todo por la torpeza de Tuukkanen, que una semana después de despuntar con 29 puntos y 39 de valoración que le valieron para coronarse MVP de la jornada se fue al descanso (38-35) con más faltas personales (tres) que puntos (dos).

No fue la mañana de Tuukkanen, pero su equipo supo convivir con ello. Lo consiguió porque sobresalió Pounds, una tiradora que puede jugar de base y a la que se le dan mejor los triples (52'2% en Liga) que los tiros de dos (31'6%). Pounds fue imparable al contragolpe, donde Mariona Ortiz se siente como pez en el agua. La base se puso las botas en el último cuarto con siete puntos, repartiendo canastas y poniéndole un tapón a Sara Gómez: “Esta victoria es muy importante para nosotras. Es la segunda consecutiva”.

UNB OBENASA 63 (22+16+10+15): Asurmendi (9), Argüello (14), Sotiriou (8), Putnina (16) y Laura Herrera (11) –quinteto inicial–, Raquel Herrera, Revuelto, Gómez (5) y N’Diaye. TINTOS DE TORO CAJA RURAL 75 (17+18+15+25): Chatzinikolaou (4), Ortiz (13), Pounds (24), Denson (10) y Tuukkanen (4) –quinteto inicial–, Mestdagh (5), Molina-Prados, Gimeno (5), y Stewart (10). Árbitros: Bravo Loroño y Uruñuela Uruñuela.

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