Cronómetro de Récords entrevista a la escolta del Bàsquet Femení Sant Adrià
Nora Galve con un grupo de jóvenes admiradoras y también jugadoras del Bàsquet Femení Sant Adrià. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. |
Toni Delgado / Sant Adrià de Besòs
En media décima de segundo la entrevista pasa de íntima a pública. Se acercan hasta nueve jugadoras de categorías inferiores del Bàsquet Femení Sant Adrià y miran con admiración a Nora Galve (l'Hospitalet de Llobregat, 2001). Quieren hacerse, como mínimo, una foto con ella. La escolta es un buen espejo en el que fijarse. Nora Galve tiene una pausa impropia de su edad o quizás de cualquiera. Sus pies están bien colocados en el suelo. Nada la perturba. Tampoco los éxitos. Su futuro es el presente cercano.
—Os ha faltado media uña para ganar a un equipazo como el Valencia Basket (64-67).
Sabíamos que era un partido muy difícil ante un rival muy bueno, y hemos hecho un gran encuentro. Al final, no ha podido ser. Estamos contentas de nuestra actuación. Hemos trabajado muy bien toda la semana.
—En varias ocasiones habéis luchado entre vosotras por un rebote. Casi os lo quitáis de las manos. Eso es actitud. Espírito de equipo.
En el arranque de curso nos faltó actitud en defensa y se ha notado que hemos trabajado ese aspecto. Todas hemos estado al 100% y, pese al resultado, nos sentimos orgullosas.
—¿Cómo habéis trabajado la confianza en el equipo?
Glòria Estopà nos da mucha a todas en los entrenamientos y partidos. Cada una sabe cuál es su rol en el grupo.
—A veces, la confianza también llega de fuera. La adaptación de Meighan Simmons es increíble. Se ha acoplado al Bàsquet Femení Sant Adrià en un segundo.
Es una jugadora con mucha experiencia. Como quien dice, acaba de aterrizar y parece que lleve mucho más tiempo con nosotras. Estamos muy contentas con Simmons: es muy inteligente en la pista. Sabe qué tiene que hacer en todo momento.
—¿Cómo te sentías el 14 de octubre a las 13.15?
[Se ríe]. ¿Fue el Open Day Liga Día, no?
—Sí... No te preguntaría algo personal... [Risas].
Fue un momento muy bonito. Me encanta jugar en este nivel, además de por todo cuanto aprende en los entrenamientos y las compañeras. Es una oportunidad muy buena para mejorar y seguir creciendo.
—Has debutado en la Liga Día con 17 años, cinco meses y cinco días. Es hacerlo rápido.
Es verdad. Le agradezco al club esta oportunidad. El Bàsquet Femení Sant Adrià apuesta mucho por la cantera. Estoy muy contenta.
—En tu primer partido oficial, en la previa de la Lliga Catalana ante el Cadí La Seu, también tuviste muchos minutos. Estuviste descarada, tranquila... Aunque las cosas sean muy grandes, te las tomas de una manera muy natural.
Sí, sobre todo porque ya había tenido a Glòria Estopà cuando era cadete. Fuimos campeonas de España con ella. Es una entrenadora a la que conozco y con quien me siento muy cómoda. Por eso tengo esta tranquilidad.
—De hecho, en el descanso de tu primer partido en la Liga Día fuiste la cuarta jugadora que más lanzó del equipo.
Sí, acabé siendo la más valorada del grupo. [Risas]. Bueno... No sé. Siempre intento hacerlo lo mejor posible.
—Hace unos años tu ídolo era Víctor Sada.
Y lo continúa siendo, aunque se acabe de retirar. Sobre todo me gustaba por su estilo de juego. También admiro a Queralt Casas porque me encanta su juego y su actitud. Me siento identificada con su manera de hacer las cosas.
—Es decir, que ofreces intensidad máxima, disfrutas y haces disfrutar, y no das nada por perdido. Porque eso es Queralt Casas.
Exacto. Yo sé que mi papel aquí es para ayudar al grupo. Tenga los minutos que tenga, sea uno, dos, 20... Cada momento que esté en la pista trato de ayudar al máximo al sénior de mi club.
—¿Cómo fue el adiós de Imani Wright? Es extraño que una jugadora dure tan poco en un club.
Fue una decisión interna y algo un poco inesperado por el grupo. Estamos muy contentas con Simmons.
—En una entrevista en Televisió de l'Hospitalet confesaste que te abriste la cabeza en un partido.
De hecho, me ha pasado dos veces: en la semifinal de un campeonato infantil y en un partido de liga. Me quedé inconsciente y pasé la noche en el hospital. Forma parte del deporte.
—Pero la primera vez fueron cuatro días de ingreso, ¿no?
Sí, fue un poco más fuerte. Estaba en Pontevedra y fue un poco más lío. La segunda, una noche y en Barcelona. Estuve haciendo reposo cuatro días.
—Eres muy joven, pero... ¿Te tomas la vida de otra manera después de aquello o no?
[Se ríe]. Siempre me dicen que necesito tener un poco más de cabeza en el momento de juego. Siempre quiero dar e ir al máximo y, a veces, tengo que parar un poco. Aunque creo que es mi estilo de juego y, sinceramente... No me sale hacerlo de otra forma. Las lesiones también forman parte del deporte y, sobre todo, del baloncesto, donde hay bastante contacto. He seguido jugando igual.
—Yo también soy de l'Hospitalet. Explícanos tus orígenes en nuestra ciudad.
Sí, comencé en el Casino, un año, y después fui a l'Hospitalet Centre con una amiga de allí, Elena Font, y estuvimos un año, pero el equipo era mixto. Nos dijeron que había un equipo muy bueno en el Cornellà y nos fuimos.
—¿Cómo sentías el baloncesto en aquel momento?
Era muy pequeña... [Se ríe]. Yo iba allá y no era consciente de qué pasos podría llegar a dar. Que pensase entonces que ahora podría estar aquí se me hace muy raro.
—En una entrevista en diciembre del año pasado te preguntaban por tu futuro inmediato hablaste, por ejemplo, de ganar el campeonato de clubes de Catalunya para aspirar a alzar el estatal. No mencionaste debutar en Liga Día. De nuevo, paso a paso, ¿no?
En aquel momento estaba con el júnior y mi objetivo era ganar los campeonatos de España. Me entreno para lo que entreno. No pienso en lo que vendrá. Lo que viene es por el trabajo que haces, y ya llegará.
—¿Cómo y cuándo te dijeron que estarías en el primer equipo?
Bueno, de hecho, el año pasado ya me lo comentaron y les dije que no porque comenzaba Bachillerato y no tenía tiempo suficiente. Éste, como es el último de júnior, acepté. Realmente es duro estar en segundo de Bachillerato y entrenarte cada día hasta muy tarde. Pero... ¡No puedo decir que no! Es brutal.
—¿Estás haciendo bachillerato de ciencias o de letras?
Social.
—Es verdad, querías ser maestra de peques.
Exacto.
—Por tu tono, didáctico, se nota que te gusta mucho enseñar y aprender de los demás.
Tal cual. Me encanta tratar con las personas, sobre todo con niños y niñas.
—El fotógrafo Luis Javier Benito, LuisJa, te grabó en el Torneo de la Amistad, en Francia, con la selección sub 15. ¿Te hizo cosa que se viese tanto esa jugada?
¡Qué va! Los partidos de la selección española también se cuelgan.
—"Creo que vi jugar a Nora en infantil y ya intuí que tenía algo", me cuenta Luisja. [Se ríe]. ¿Qué crees que es ese "algo".
¡No sé! [Risas]. Yo desde fuera no me veo. Todo el mundo me dice que siempre doy lo máximo de mí.
—¿Y cuál es tu mirada sobre ti?
Más o menos parecida: soy una jugadora que siempre intenta sumar y hacer su papel respetando el del resto. Soy consciente de que mi rol es ayudar, especialmente en defensa, y en ataque atacar y liberar tiros. Intento hacer cuanto me piden.
—Un pasito a pasito en el que también encaja el Bàsquet Femení Sant Adrià.
El club disfruta de éxitos por su excelente trabajo de cantera. ¡En cinco años hemos pasado de Copa Catalunya a Liga Día! Se valora mucho la actitud de las jugadoras dentro y fuera de la pista. Dani Poza tiene un don para escoger a las jugadoras que vienen. A los sueños se llega con trabajo, trabajo y más trabajo.
No hay comentarios :
Publicar un comentario