Las circunstancias determinan el valor de los logros. Así que la gesta de Pete Mickeal (Rock Island, Ilionis, EE UU, 1978) tiene un valor incalculable. No sólo por la recompensa, la sexta Copa del Rey de la historia del Tau, sino por los propios condicionantes. Con Igor Rakocevic y Tiago Splitter eliminados por faltas en el banquillo el alero estadounidense asumió toda la responsabilidad de su equipo en la prórroga anotando anotó ocho de sus 20 puntos en la prolongación, incluida la última canasta a 23s. A Mickeal también le dio tiempo a taponar el triple desesperado de Berni Rodríguez, que había recibido la patata caliente de Robert Archibald. El pívot escocés (16 puntos y 13 rebotes) no se atrevió a jugarse el último tiro y cedió la pelota a su compañero. El Tau se impuso a Unicaja 98-100 y continúa completando una temporada histórica: ha ganado los dos títulos en juego, Copa y Supercopa. Mirza Teletovic (20 puntos, 6/10 en triples) se llevó el premio individual, ser nombrado MVP del torneo. Un reconocimiento que no fue para Mickeal porque la votación se cerró a falta de cuatro minutos para la conclusión del cuarto período.
“En momentos decisivos Pete (Mickeal) siempre o casi siempre acierta”, subrayaba el técnico del Tau Dusko Ivanovic, que logró la cuarta Copa en España. “Se ha echado el equipo a las espaldas”, insistía Splitter. El protagonista del partido observaba satisfecho cómo Pablo Prigioni completaba con su particular ritual de subirse al aro para cortar la red. Lo mismo que había hecho en 2006, también el Palacio Vistalegre de Madrid, tras ser escogido MVP y ganar el torneo ante Pamesa.
Rakocevic y Splitter, desconocidos
Dotada de una emotividad e intensidad extraordinarias, la final esquivó el tópico que describe la mayoría de finales como una apuesta descarada de los entrenadores por las precauciones y el control. Aíto, el entrenador con más Copas (5), e Ivanovic quisieron tomar riesgos. Y fue Unicaja quien impuso el ritmo que más le convenía al principio: transiciones rápidas y ataques tan pragmáticos como contundentes. Optó por la velocidad entendida como compromiso de precisión y precisión. Unicaja recuperó hasta seis pelotas en el primer cuarto. La piedra angular de la maquinaria era Carlos Cabezas, inédito en el torneo por problemas físicos. El base dirigió con acierto a un Unicaja en el que los puntos corrían a cargo de Marcus Haislip y Jiri Welsch, y la defensa, de Archibald, que incluso le hizo dos gorros a Rakocevic. El escolta serbio se fue al banquillo con una clara desventaja (11-3 a los 3m10s) y habiendo fallado sus dos tiros. Tampoco rendía Splitter. El pívot brasileño ni tan siquiera tiró en toda la primera parte. No pudo con sus defensores.
Sin Rakocevic ni Splitter acertados, el Tau recurrió a su capitán, Sergi Vidal, el recambio exterior más talentoso de la Liga, el único jugador que ha ganado cuatro Copas. Su incidencia resultó inmediata: aportó desparpajo y claridad, además de un triple que ayudó a su equipo a remontar (11-12 a los 5m30s). El grupo de Ivanovic pasó a llevar la iniciativa. Llevaba la batuta a la contra, algo que intentó evitar Aíto dando la dirección de Unicaja a Omar Cook y poniendo en pista a Berni y Nnong, el nuevo defensor de Splitter. El brasileño sería relevado por Teletovic, que anotó ¡cuatro triples! en el segundo cuarto. Los dos primeros sirvieron para darle una ventaja mínima al Tau (26-31 a los 14m32s), los otros dos, para minimizar la reacción de Unicaja al descanso (44-43). Teletovic iba camino del MVP. Idéntico destino que Haislip en el otro bando. El cuatro estadounidense jugaba abierto, sabía forzar faltas con tiro y aportó 12 puntos en la primera parte (acabó con 23 tantos y cinco rebotes).
Contraataques
Como en las semifinales ante el Barça el Tau empezó el tercer cuarto empequeciendo por completo a su rival, que no parecía mayor virtud que una torre como Ndong y jugadores anárquicos con cierto talento. Ivanovic cuestionaba la idiosincrasia del Unicaja de Aíto gracias al acierto exterior de Vidal (16 puntos), Teletovic y Rakocevic (18). Con los primeros puntos de Splitter el conjunto vitoriano igualó su máxima renta hasta entonces (54-60 (a los 28m16s).
A partir de la defensa y con sus bases (Cook y Joseph Gomis, Cabezas no jugaría la segunda parte) como perfectos enlaces Unicaja empató a 67 (a 7m27s). Una recompensa que no le duró demasiado: recibió un parcial de 4-12 gracias a dos triples de Teletovic y Rakocevic (71-79 a 5m05s). Al acierto del Tau desde el perímetro se sumaba el interior, por fin con Splitter siendo Splitter, ese jugador ágil e inteligente que renunció el curso pasado a la NBA. El brasileño anotó diez de sus 12 puntos en el último cuarto. Contribuyó en ataque hasta que cometió la quinta personal sobre Gomis, el gran responsable de la excelente respuesta de Unicaja. El francés, muy valiente, hizo una jugada de dos más uno, pero falló el tiro libre adicional (87-87). Al grupo de Ivanovic le quedaba la última posesión, pero Teletovic fallaría el triple con el que pudo finalizar el partido. La prórroga decidiría una final exquisita y caprichosa, porque a falta de 18s Vidal había errado los dos primeros libres de su equipo…
Se le complicaron aún más las cosas al Tau con la eliminación de Rakocevic, pero apareció Mickeal para resolver por todos. Prigioni, desde la línea de personal, pondría el 95-98 a falta de 57s, pero Haislip metería su único triple (1/6) para empatar a 98 falta de 46s. El resto de cosas corrieron a cargo de Mickeal, que primero anotó una canasta inverosímil a 23s y después taponó el triple de Berni. Fue el gran artífice de que el Tau ganase su sexta Copa, por mucho que el trofeo MVP no lo reconociese como tal.
2 comentarios :
enhorabuena al Tau se lo merece
Saludos
Hola Toni
Soy Mariano de Génesis, ya he colocado el enlace, por cierto muy buen Blog y aprovecho para felicitar al Tau.
Un saludo.
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