Los nervios de acero de Mario Hezonja

La perla croata, Lampe y Oleson impulsan al Barça hacia su sexta final consecutiva de Copa del Rey ante un bravo Unicaja (87-79) 

Hezonja celebra una canasta. ACB Photo. 

Tiene destellos de jugador infinito y detalles de niño que a veces no se contiene. En cuartos de final Mario Hezonja (Dubrovnik, Croacia, 1995) se ganó una técnica por protestar que le había hecho falta. Ante el micrófono de Teledeporte fue más maduro: "Es culpa mía. Yo tengo que hablar solo con Xavi [Pascual] y con mis compañeros". Hezonja es una esponja, aunque a veces pierda los nervios. Los tuvo de acero el alero croata para frustrar, junto con Oleson y Lampe, a un Unicaja que dominó gran parte del

partido y sucumbió en el tramo final con un parcial de 26-13, en el triunfo azulgrana por 87-79. El Barça jugará en el Gran Canaria Arena su sexta final consecutiva de Copa del Rey.  

Xavi Pascual ha querido proteger a Hezonja de los focos y dosificar su presencia poco a poco. El curso pasado no le dio minutos en la Copa ni tampoco en los playoff de Liga y ahora sabe que puede ponerle en los momentos calientes. Lo hizo a falta 9m 8s y con 59-62 en el marcador. Hezonja, casi siempre serio, suplió a DeShaun Thomas. Hasta entonces, el croata  sólo había jugado 5m 33s, pero realizó una lectura perfecta de la situación. Poco importó que Germán Gabriel y Markovic distanciasen a Unicaja (62-68 a 7m 10s) ni que Tomic fallase su tercer tiro libre de cinco. Hezonja cogió aire para meter dos triples y una canasta de dos. Ocho puntos (81-72 a los 2m 21s) que apagaron la luz de Unicaja, sin opciones tras unos pasos de Granger y un triple de Lampe, inédito en cuartos e inmenso en semifinales. Con el pívot polaco y Doellman en pista el Barça se engrandeció en defensa. 

Sueltos e indispuestos 

Una faceta silenciosa en la que de nuevo destacó Oleson, al que el equipo siempre echa de menos cuando no está. Es un jugador que niega a quien defiende e ilumina a sus compañeros. Oleson fue el primer en rescatar en el tercer cuarto a unos azulgrana que habían empezado el partido sueltos con tres triples de DeShaun Thomas e indispuestos defendiendo su propio rebote. Hasta siete jugadores diferentes del conjunto de Joan Plaza habían anotado un triple (9/16 en una primera parte que acabó 34-39). Kuzminskas estaba como Pedro por su casa. 

Pero fue Oleson quien centró al Barça tras el descanso con un alley oop para Tomic, dos triples y su inteligencia. Tomic se vació en defensa y en ataque y el partido se convirtió en un intercambio de canastas sin tregua, con Huertas más centrado y certero. Quedaba la vuelta a pista de Hezonja, que sabe latín pese a sus 19 años. 

BARÇA 87 (18+16+25+28): Satoranksy (9), Oleson (11), DeShaun Thomas (13), Doellman (9), Tomic (10) –quinteto inicial-; Hezonja (12), Marcelinho (5), Abrines (2), Navarro (4), Pleiss (2), Lampe (10) y Nachbar (0). UNICAJA 79 (15+24+20+20): Markovic (4), Toolson (3), Carlos Suárez (10), Will Thomas (5), Golubovic (0) –quinteto inicial-; Gabriel (2), Vasileiadis (9), Granger (12), Fran Vázquez (8), Kuzminskas (13), Stefansson (5) y Green (8). Árbitros: García, Perez y Peruga. Gran Canaria Arena. Unos 9.500 espectadores.