"Astou Ndour siempre ha tenido muy claros sus objetivos y la cabeza sobre los hombros"

Yurena Díaz, Domingo Díaz y Miguel Ángel Ortega retratan a la pívot, fundamental para eliminar a Senegal en octavos (63-48) y citar a España en cuartos con Canadá

Astou Ndour lanza a canasta. Foto: FIBA Europe. 

"La risa es la distancia más corta entre dos personas".

"La vida no se trata de encontrarte a ti mismo. La vida se trata de crearte a ti mismo". 

Las primeras conversaciones entre Yurena Díaz y Astou Ndour (Dakar, Senegal, 1994) podrían ser un ejemplo gráfico de esas dos reflexiones del dramaturgo irlandés George Bernard Shaw.

—Recuerdo que los primeros días fueron muy difíciles. No sabíamos muy bien cómo comunicarnos entre nosotras, pero Astou siempre ha sido muy intuitiva. Es una persona curiosa. Desde el primer momento quería aprender, y lo más divertido era enseñarle palabras nuevas. Astou me las repetía en su idioma, pero creo que la que salió ganando en ese intercambio fue ella –recuerda Yurena Díaz, base del Cadí La Seu y que creció en el CB Islas Canarias con la máxima anotadora de la selección española en el Mundial de Tenerife con 53 puntos. 

Astou Ndour promedia en la Copa del Mundo 13,3 puntos (41,7% de efectividad en tiros de dos) y ante su país de origen, Senegal, casi clavó sus números (14 tantos y 42% de acierto). La nueva pívot del Cukurova Basketbol turco fue fundamental para doblegar en octavos de final por 63-48 a un rival corajudo que sólo cedió en los últimos ocho minutos. Canadá será el viernes el adversario en cuartos.    

Ndour llegó a Las Palmas con 14 años. Aminata Diop, una amiga suya, habló bien de Ndour cuando fue a hacer las pruebas con el CB Islas Canarias. Astou aterrizó con anemia. Era alta y muy delgada. "Teníamos que trabajar muchísimo con ella para competir y llegase lo más lejos posible", cuenta su exentrenador en el club, Domingo Díaz. Se necesitaba paciencia para pulir a una adolescente que tenía poca resistencia y "apenas" aguantaba cinco minutos de entrenamiento: "Ayudó mucho su actitud, pues tenía muy claro a qué había venido a España. Quería ser jugadora profesional". 

"Sí, sí, sí, sí", contesta Domingo Díaz cuando le pregunto si Astou Ndour siempre fue una jugadora entrenable. Tenía disciplina, era obediente y añoraba mucho a su familia, que respetó y apoyó su sueño. Aprendió español muy rápido y se sacó el carnet de conducir a la primera. Se dio a conocer con un mate a dos manos en un Campeonato de Canarias júnior. Era cadete. En el CB Islas Canarias quisieron guardar en secreto la jugada un tiempo porque era menor de edad: "No queríamos ponerle en la boca más de lo que pudiese masticar. Tenía que digerir la fama poquito a poco. Aunque las propias rivales se nos adelantaron e hicieron pública la jugada. Bueno, es que un mate lo puede lograr cualquier jugadora alta que salte un poco. No es una prioridad. Sí lo eran otros aspectos que tenía que mejorar, como la defensa". 

"No me fío mucho de lo que dice la gente", confesó Ndour en un programa de NBA+ dedicado a la WNBA. Hacía muy poco que había sido escogida en el número 16 del draft por las San Antonio Stars y se refería a las expectativas, los consejos y las críticas. "Siempre ha tenido muy claros sus objetivos y la cabeza sobre los hombros. En el club siempre advertimos a las jóvenes que si ganan y tienen fama, se les acercarán personas por el interés. Astou entendió bien el mensaje, el de no fiarse de todo el mundo. Sabe perfectamente que quien mejor la puede asesorar es su familia", sigue Domingo Díaz. 

La otra familia de Ndour son Begoña Santana y Domingo Díaz, una de las parejas que más perlas han pulido en el baloncesto femenino español. Siempre promocionan las noticias y progresos de las exjugadoras del club. Incluso las van a ver jugar fuera. El vínculo no se pierde. "Eso espero, que se conserve. En la vida recorres un camino, pero no debes olvidarte de lo andado", continúa Domingo Díaz, "muy orgulloso" de cómo ha madurado Ndour: "¿Que tiene que ser un poquito más regular? Seguro. Los números que hacía en nuestro club son difíciles de igualar o superar porque aquí tenía más libertad que en otros, que a lo mejor se están jugando títulos o están mucho más profesionalizados. Es una jugadora bastante completa". 

Yurena Díaz sonríe cuando recuerda su etapa con Astou Ndour en el CB Islas Canarias: "Poder jugar juntas siempre fue un lujo porque sabía que ella iba a darlo todo siempre. Hay personas con las que, simplemente, conectas en una pista y Astou, para mí, es una de ellas. Ha evolucionado en todos los aspectos. Lo más impresionante es que pasó de llegar sin saber botar muy bien hasta convertirse en una pívot capaz de cruzar la pista con el balón y acabar un contraataque sola. O de abrirse en determinados momentos del partido y meter un triple". En su última temporada juntas formaron parte de un grupo muy joven, con mucho corazón y al que, a veces, se le cruzaban los cables fruto de la inexperiencia: Brittany Chambers, Chelsea Davis, Patricia Cabrera, Iris Junio... MVP de la fase regular de la Liga, Ndour fue la mejor de ocho jornadas. "Vimos que necesitaba dar un paso adelante a nivel profesional. Ayuda a su familia, bastante numerosa. Llevó en volandas a un equipo humilde pensado para mantener la categoría hacia la Copa de la Reina y las semifinales de Liga", recuerda Domingo Díaz. "Ese año fue muy especial. Compartimos muchas cosas bonitas", interviene Yurena Díaz. Ndour haría las maletas rumbo al Fenerbahçe, donde sólo estuvo un curso. En el verano de 2015 debutó con la selección absoluta en un gran torneo porque Atlanta Dream no dio permiso a Sancho Lyttle para disputar el Eurobasket de Hungría y Rumanía. Ndour resultó vital para lograr la medalla de bronce. También fue muy importante en la plata de los Juegos Olímpicos de Río y lo está siendo ahora. En ambas ocasiones Lyttle ha sido baja por lesión. 

El único título en España de Ndour fue la Liga Femenina de 2016 con el Perfumerías Avenida de Miguel Ángel Ortega, que intentó ayudarla "en los detalles básicos y esenciales para mejorar su defensa". Tras Gabriela Marginean, fue la segunda jugadora a la que dio más minutos: "Astou siempre mantuvo la actitud correcta. Creo que en estos momentos su juego en general es más consistente y cerca de canasta, más dominante, que hace un tiempo". 

Cada vez más Astou Ndour reduce los instantes en los que se bloquea en los partidos y parece que no le salga casi nada, como si estuviese perdida. Su partido ante Bélgica, en el que fue eliminada tras sólo 13 minutos en pista, no es habitual. "Es una jugadora que intenta evitar los contactos y faltas, pero creo que fue una buena lección para ella y sus compañeras. Es necesario acoplarse a equipos que practican otro baloncesto, no es muy claro, y a un arbitraje que permite o no en según que momentos. Tanto Astou como España cometieron errores poco habituales ante una Bélgica enchufadísima que metía casi todo", analiza Domingo Díaz.   

Otra historia fue ante su país de origen, Senegal. En la grada del Pabellón Santiago Martín, Astou Ndour tuvo el apoyo de su familia de sangre, y este viernes volverá a reunirse con la deportiva, Domingo Díaz y Begoña Santana. Con ocho puntos en el primer cuarto, la pívot internacional minimizó el 4/5 en triples de un rival se escapó por 18-25 (a los 12m 10s). Anna Cruz y Laura Nicholls (seis puntos y 13 rebotes en 35m 15s) rescataron a una España que jugaba atenazada, como si todavía estuviese dándole vueltas a la derrota contra Bélgica que le había obligado a jugar los octavos (34-34 al descanso). Cristina Ouviña, siempre certera desde el banquillo, Ndour y Alba Torrens impulsaron a la selección (45-36 a los 25m 3s) ante una Senegal que redujo distancias (48-43 a falta de 8m 33s). Entre Anna Cruz, los cuatros únicos puntos de Marta Xargay (1/3 en tiros de dos y 0/5 en triples) y Ndour se finiquitó un partido en el que España mejoró en defensa (especial mención a la de Xargay a Astou Traoré) y volvió a sufrir demasiado para anotar en muchas fases.