Rebeca Cotano: "Aunque soy muy tímida, intento actuar como anfitriona con las nuevas porque el Valencia Basket es mi casa"

Cronómetro de Récords entrevista a la pívot del Valencia Basket en la Copa de la Reina 

Rebeca Cotano tras la entrevista. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

Toni Delgado (@ToniDelgadoG) / Salamanca

A veces la mejor respuesta a una pregunta es no ser capaz de responderla. 

—Rebeca, ¿qué es para ti una sonrisa?  

—¿Qué es para mí una sonrisa?

—Sí. O provocarla. 

—Buff... No sé. Es una pregunta difícil, eh. 

—Pero tú te ríes mucho. La sonrisa es importante para mí. 

—Yo siempre tengo la sonrisa puesta, pero no sabría cómo contestarte.

"Érase una mujer a una sonrisa pegada", escribiría Francisco de Quevedo para empezar a retratar a Rebeca Cotano (Valencia, 1995). La pívot del Valencia Basket desprende mucha verdad y optimismo. Le brillan los ojos. Se nota cuánto ha luchado por vivir momentos así con su equipo. Rebeca Cotano no ha jugado en el triunfo por 69-54 ante el CB Clarinos en cuartos de final de la Copa de la Reina de Salamanca, pero se ha dejado el alma animando desde el banquillo. Al Valencia Basket le espera en semifinales el Uni Girona (Teledeporte, 16:30 horas).  

—Lo habéis pasado fatal, pero a la tercera habéis ganado al CB Clarinos. 

¡Por fin! [Irene Garí aparece en zona mixta y se pone a cantar]. El CB Clarinos nos había ganado los dos partidos en la Liga Femenina Endesa... Hemos tenido un poco más de tiempo para preparar éste... ¡Y ganamos!  

—Meiya Tirera, Anna Gómez, Queralt Casas... Varias jugadoras han tenido sus rachas en el partido, pero ha sido Rosó Buch quien ha decidido el encuentro. Se ha dejado sus 11 puntos para los últimos 7m 25s. Tres triples...

¡Brutal! Cuando Rosó se pone en modo Globetrotter... ¡No hay quien la pare! ¡Y cómo sonríe! Desde que ha llegado ha sumado muchísimo. Tanto Rosó como Robyn Parks se han adaptado muy rápido y nos lo han puesto súper fácil. 

—¿Robyn Parks tenía algún problema físico? 

No. Le dio un pequeño tirón en la espalda, pero estaba bien. 

—Irene Garí te llama La Histórica: de jugar Nacional en la Malvarosa a disputar la Liga Femenina Endesa, la Copa de la Reina y la Eurocup.

Estoy casi desde los inicios de un club que me ha puesto ese papel. ¡Yo encantada! Ojalá pueda seguir haciendo historia con el Valencia Basket, que para mí es un sentimiento, mi casa. La afición es familia también. 

—Si te digo Jose Canales, ¿qué se te remueve por dentro?

¡Todo! Gracias a Jose Canales estamos aquí. Le estoy muy agradecida por todo.  

—Fue el entrenador con el que conseguisteis el ascenso a Liga Femenina 2. Seguramente es el paso más difícil. 

Sí, y luego conseguimos mantenernos en la categoría. 

—Begoña Pallardó, con una canasta sobre la bocina, hizo posible ese primer ascenso... 

¡Buah! De hecho, esa jugada fue un poco desastre porque estábamos todas un poco nerviosas y no sabíamos quién iba a acabar la acción... Bego hizo un gancho por la izquierda inédito y... ¡Lo metió! Se me pone la piel de gallina.  

—¿Cómo viviste el encuentro de Eurocup ante el WBC Enisey, en el que superaste la cifra de Esther Díaz como jugadora más partidos en el Valencia Basket?

No lo sabía. Lo comentaron en el encuentro y montaron una fiesta. Y yo... Súper contenta. 

—¿Dónde tienes la pancarta "Rebeca Récord" que te regalaron unos aficionados?

En mi taquilla del vestuario. ¡Me encantó! 

—¿Cómo recuerdas la desaparición del Ros Casares?

Tuve la oportunidad de irme al Segle XXI y la aproveché. Tenía claro que quería volver y el Godella nos puso facilidades para poder continuar, y del Godella pasé al Valencia Basket. 

—Varias os reencontrasteis en el Valencia Basket. 

Tal cual. Eso se ha notado y se sigue notando en la pista. Hablo de la complicidad y la confianza que se generan cuando has compartido tantos momentos.  

—"Cuando me lo preguntaron por aquel entonces, nunca habría dicho que iba a dedicar o iba a ser jugadora profesional de baloncesto. Ha sido un cambio rápido, ¿no?", confesabas en noviembre en una entrevista del club.

Ha sido un cambio progresivo y rápido: de Nacional a Liga Femenina 2, de Liga Femenina 2 a Liga Femenina Endesa y ahora jugamos también en Eurocup. Para mí ha sido un poco complicado, pues no he podido adaptarme muy bien a todas las competiciones... Pero estoy súper orgullosa.  

—Vuestros ascensos han sido súper competidos: el Celta os lo puso muy difícil en la Fonteta para alcanzar la Liga Femenina.

Ninguno resultó sencillo. Al final, el trabajo diario acaba dando sus frutos. 

—Tanto tú como Irene Garí siempre os acordáis de las compañeras que han contribuido a llevar hasta aquí al Valencia Basket, como Leles Muñoz, Begoña Pallardó, Esther Díaz o Virginia Sáez. Repetís que lucháis y ganáis por ellas. 

Sin Jose Canales y aquel bloque, no estaríamos aquí. Ellas, en el fondo, también juegan con nosotras. 

—A pesar de perder por lesión a piezas claves como Leticia Romero y María Pina, ocho derrotas en Liga Femenina Endesa me parecen muchísimas para la plantilla que tenéis. Son las mismas que el año pasado en Liga regular, pero a falta de cuatro partidos. ¿Cómo lo ves tú?

Bueno, al final todos los equipos mejoran sus plantillas y cada partido es un mundo. Hemos tenido bajas, nuevas incorporaciones... Como jugamos dos competiciones, tampoco podemos preparar los encuentros de Liga Femenina Endesa con todo el tiempo del mundo. Quizás ese detalle nos haya pesado un poco en ciertos partidos. 

—Irene Garí rompió a llorar tras vuestra primera victoria en la Eurocup en Hungría. "Lo hice por el cambio tan grande que es pasar en muy pocos años de jugar ante 100 personas a hacerlo  en Europa. El abrazo con Rebeca fue muy emotivo y nunca lo olvidaremos", aporta. 

Un abrazo histórico también. [Sonríe]. Súper histórico. Para mí es importante hacer historia con el Valencia Basket y compartirlo con Irene, que estaba en el bloque inicial, es súper importante. Su apoyo es vital para mí.  

—Habláis mucho en el banquillo. Os conocéis desde muy pequeñitas.  

Desde el Ros Casares infantil. Ella se fue al Segle XXI antes que yo, pero nunca perdimos el contacto.  

—Donde hay mucho contacto es en la parte trasera del autobús: siempre estáis el cuarteto Queralt Casas, Tamara Abalde, Irene Garí y tú. Habláis y os reís mucho.

¡Es una fiesta! 

—"Rebeca es muy buena persona, sincera y siempre se preocupa por el resto", te retrata Irene Garí.

¡Jo! Irene Garí me está poniendo aquí... ¡Le voy a tener que comprar algo! [Se ríe]. Intento tener siempre buena actitud y ayudar al equipo jugando o como sea. 

—Me cuentan que eres una gran conocedora del refranero español...

¿Ha sido Marina Lizarazu?

—No, Tamara Abalde. 

Ah, bueno... También. [Sonríe]. Tienen un cachondeo con el tema... No sé por qué, pero utilizo muchos refranes... Y ahora ya soy la refranera del equipo. 

—Pues, de momento, no has dicho ninguno... 

Ahora mismo no se me ocurre ninguno... Siempre acabo metiendo un refrán por ahí. 

—"Rebe es una gran anfitriona para las nuevas. [La temporada pasada] conectamos mucho desde el primer momento", confiesa Tamara Abalde. Rosó Buch, como decías, lo ha hecho rápido, y Robyn Parks, por lo que me cuentan en el Bàsquet Femení Sant Adrià, es muy divertida. 

Son todas buenas niñas. Ellas también lo ponen fácil. En realidad soy muy tímida, pero intento actuar como anfitriona con las nuevas porque el Valencia Basket es mi casa. 

—¿Qué sientes cuando entras en L'Alqueria del Basket? 

Pienso muchas veces en cómo han cambiado las cosas. Antes no teníamos pabellón propio y nos entrenábamos en la Malvarosa, una cancha de Valencia. Ahora, con estas instalaciones, todo es mucho más fácil. Es un cambio brutal. 

—¿Es como volver a la escuela? 

Tal cual. Da mucha vida ver a niños y niñas yendo a entrenar como lo hacíamos nosotras de pequeñas. Se te remueve algo por dentro, pues para ellos y ellas es impresionante cruzarse con nosotras. Nosotras nunca pudimos vivir eso: teníamos dos pabellones diferentes y si queríamos ver a las mayores teníamos que ir a sus partidos. ¡Qué ilusión tienen!

—Rebeca, no te conocí de pequeña, pero tu mirada es de niña. 

¿Por qué? [Se ríe]. 

—Por esa ilusión que desprendes. 

No sé. Es lo que te digo: todo esto para mí es ilusionante. 

—"Lo que más admiro de Rebe es su constancia: es muy trabajadora y siempre lleva una sonrisa puesta", te describe Tamara Abalde. 

¡Jolín, Tamara! ¡Madre mía! ¡Otra a la que le voy a tener que comprar algo! Intento sumar en lo que sea. 

—¿Cómo es Tamara Abalde como compañera de habitación? 

¡Genial! La verdad es que hemos congeniado muy bien desde el primer año. También pone las cosas muy fáciles. Para mí Tamara es la voz de la experiencia: le pregunto muchísimas cosas y me ayuda en muchas facetas.  

—Entiendo que a su perro le caes bien. A Tamara le recomiendas rutas para que salga a pasearlo. 

¡Es así! Yo también tengo perra y hablamos de esos temas. 

—En menos de 24 horas os jugaréis el pase a la final de la Copa de la Reina de Salamanca con el Uni Girona. 

Nos ha puesto las cosas difíciles durante la Liga Femenina Endesa y tiene una plantilla espectacular. Los entrenadores habrán hecho su trabajo y tendremos tiempo para preparar el partido lo mejor posible. 

—En cuartos de final de la Eurocup os esperará el Castors Braine belga de Mariona Ortiz.

A ver qué pasa. Para nosotras ya ha sido un logro llegar hasta aquí. Creo que también tendremos opciones. El trabajo es el único camino hacia tus sueños.