lunes, 29 de octubre de 2007

Huertas hace posible la primera derrota del DKV Joventut

Marcelinho Huertas salta ante la defensa de Jan Jagla. -EFE

Nunca es fácil ver cómo tu situación cambia de repente. Hace un año a Marcelinho Huertas (Santa Catarina, Brasil, 1983) le costó asumir que dejaría de ser el relevo y el principal complemento de Elmer Bennett, el base titular del DKV Joventut. No le fue fácil comprobar al jugador brasileño que ese papel sería para Ricky Rubio, un joven prodigioso de 16 años que había asombrado Europeo sub 16 y que desde el primer partido jugó más él.

Huertas
no se entretuvo en lamentos y malas palabras ante al prensa, se limitó a aprovechar sus oportunidades. Su gran día fue ante el Akavasyu Girona en los cuartos de final de la Copa del Rey de Málaga, donde fue el jugador decisivo a pesar de no jugar ni 10 minutos.

Máximo anotador

Ni el club verdinegro ni el propio
Huertas querían repetir otro año así. Por eso a finales de la temporada pasada negociaron su cesión al Iurbentia Bilbao Basket, decepcionado por no haber podido fichar a Marko Tomas. Meses después el técnico Txus Vidorreta ya no se acuerda de aquel desengaño, está satisfecho con Huertas, que se ha convertido en el máximo anotador del equipo, con casi 15 puntos por partido, bastantes más que jugadores más mediáticos como Quincy Lewis o Luke Recker.

Por fin
Huertas se siente líder de un grupo: lo demostró en su retorno al Olímpic de Badalona ante su ex equipo. Supo dirigir el ataque del Iurbentia Bilbao Basket con 25 puntos y unos excelentes 5 de 7 en tiros de dos y 3 de 4 en triples. Fue el principal responsable de la primera derrota del DKV Joventut esta temporada (58-81). Fue su segunda mejor actuación desde que en el verano de 2004 aterrizara en Badalona. La primera fue, curiosamente, también en la quinta jornada, en la temporada 2005-2006. Entonces anotó 27 puntos ante el Fórum Valladolid para un 32 de valoración.

El reto

Lo dijo minutos antes de empezar el encuentro
Vidorreta: "Si no estamos bien en ataque, no tendremos opciones". Fue explícito el técnico del conjunto bilbaíno que sabía que sólo así podía neutralizar a un equipo que había ganado los cuatro primeros partidos de la Liga ACB anotando una media de 98'25 puntos y con una diferencia mínima de 21.

El reto era imponerse al grupo que mejor estaba jugando en Europa. El
Iurbentia lo consiguió reuniendo las mejores virtudes de su rival: robos, contras rápidas y excelente lanzamiento desde 6'25 (11 de 21 en triples por un paupérrimo 4 de 24 de su rival). Lo logró incluso lanzando 15 tiros menos (51 por 66). El primero en destacar fue otro ex jugador del club verdinegro, Paco Vázquez. El escolta balear sumó los primeros ocho puntos de su equipo y firmó la segunda ventaja visitante del partido (5-8, minuto 3). El grupo vasco no cedió.

Barton, baja en el calentamiento

Con
Rudy Fernández lesionado en la grada y Lubos Barton descartado en la rueda de calentamiento por problemas en la espalda, Demond Mallet y Ricky Rubio tenían que ser los referentes del equipo. Pero no fue así. El DKV Joventut no tuvo un líder, simplemente dispuso de un jugador algo menos desacertado que los demás. El primero fue Ferran Laviña, que asumió la responsabilidad y tiró cinco de los primeros diez lanzamientos. El grupo de Aíto no podía superar la agresiva defensa del Iurbentia (con Frederic Weis como absoluto dominador del rebote defensivo) y sólo podía acabar sus jugadas al límite de la posesión o con tiros forzados. A pesar de todo, las distancias no fueron contundentes en el primer cuarto, en el que el conjunto verdinegro sobrevivió capturando 10 rechaces ofensivos y por la inspiración en los últimos instantes de Mallet.

El ataque del DKV Joventut era muy rudimentario y artificioso. Su juego interior
casi no existía. Ni Jan Jagla, que anotó sus primeros puntos en su séptimo intento, ni Jerome Moiso podían con Weis y Banic. El grupo de Aíto falló los doce lanzamientos interiores que probó en la primera parte, un déficit que aprovechó a la perfección el Iurbentia. Todos sumaban en el conjunto visitante: salía Recker y anotaba un par de triples seguidos, Vázquez seguía aportando y Huertas lograba un triple sensacional (3/4), que hacía que la diferencia fuese más del doble (19-40, minuto 19).

Esa gran jugada fue un aviso de lo que se vería después: el monólogo de Huertas en el tercer período, en el que anotó
15 de los 19 puntos de su equipo (42-61). Un palmeo y un mate de Eduardo Hernández Sonseca redujeron al diferencia a 17 (48-63, minuto 33). El público del Olímpic soñó con la remontada, hasta que Javi Salgado con un triple al límite de la posesión y Banic le confirmaron que llegaría la primera derrota de su equipo, que acabó con 46 puntos de valoración, menos de la mitad que su rival (96). Huertas fue el principal responsable de esa decepción.

2 comentarios :

Anónimo dijo...

Le vendrá bien esta derrota a la Penya. Que Sonseca sea uno de los mejores dice mucho de cómo ha sido el partido...

Anónimo dijo...

No creo que Huertas esté al nivel de Raikkonen, porque Van Gaal no quiso que Bogarde triunfara.
En resumen, que Marion Jones no puede ganar una carrera si lucha contra Txiki Beguiristain, porque le va a ganar por la nariz.

Andorra libre!!!