Un Barça obsesivo pierde su primer partido en el Palau ante Estudiantes (71-72)

Cummings, que anotó el tiro libre decisivo, penetra ante Ilyasova -EFE.

Tras llegar a la excelencia el Barça ha pasado a ofrecer una propuesta deshilachada y ramplona, y parece no importarle defender una idea cueste lo que cueste y pierde lo que pierda. Ante Estudiantes se empecinó en un par de soluciones que sólo le sirvieron para desacreditar su juego y mejorar el rendimiento del rival. En el primer período el conjunto azulgrana se obsesionó con tirar desde más allá de 6'25, como si los lanzamientos de tres fuesen la única posibilidad de superar la defensa agresiva y cerrada estudiantil. Intentó once triples y sólo anotó uno, el que logró Juan Carlos Navarro, máximo anotador del encuentro con 22 puntos. Con otro triple, el cuarto en su cuenta particular (4/8), el escolta internacional pudo casi sentenciar el partido (68-62 a 1'33''). Pero el Barça no supo ni ampliar ni mantener la renta y cedió cometiendo un mismo error: parar con personal a Hernán Jasen, el jugador más solvente desde la línea de personal (81% en el torneo y 8 de 8 en el partido). Impulsado por el acierto del alero argentino (19 puntos, 16 en la segunda parte) y por el único triple de Iker Iturbe, Estudiantes empató a 69 a falta de 57 segundos. Con 71-71 Navarro fallaría una entrada y Daniel Santiago frenó con infracción al habilidoso Vonteego Cummings a tan sólo tres segundos del final. El base estadounidense hizo lo clásico: anotó el primero y lanzó a fallar el segundo. El rechace lo capturó Ersan Ilyasova (12 puntos y 11 rebotes) que botó rápido y lanzó desde el medio del campo. La pelota sobrevoló por encima de la canasta. Esa decisión improvisada era el mejor resumen para un encuentro mediocre del Barça, que tuvo un nefasto 35% de acierto en tiros de campo y perdió por primera vez en el Palau esta temporada (71-72). Ésta es su segunda derrota consecutiva. En Siena ante el Montepaschi su final aún fue peor.

Salvo en ocasiones puntuales, como el 13-2 de parcial en el inicio de tercer cuarto (43-26 a los 23'03''), el Barça no se sintió nunca cómodo ante Estudiantes, que pasaba por tener la segunda peor defensa de la Liga ACB. Tampoco supo aprovechar las 23 pérdidas, una barbaridad, del conjunto visitante, que empezó el partido anotando sus tres primeros tiros (2-6 a los 1'50''). Sin ritmo y con una conducción de balón deficiente, el conjunto azulgrana coleccionó errores desde el perímetro y Lubos Barton y Jaka Lakovic fallaron tres triples cada uno en un primer período. Lo único positivo fue un contraataque empezado por Gianluca Basile y culminado por el capitán Roger Grimau. Resultó la única acción con sentido y redujo la desventaja (9-17, minuto 10), que había llegado a ser de 10 puntos. El ex jugador del DKV Joventut Petar Popovic, con ocho puntos hasta entonces (14 en total), hacía y deshacía como quería en la zona.

Castigo a los titulares

Xavi Pascual castigó a su quinteto inicial y ninguno de los titulares saltaron a la pista en el comienzo del segundo período. Una consecuencia lógica, pero poco habitual. Andre Barrett sustituyó a Lakovic (5 puntos y 0/5 en triples) como organizador. El base neoyorquino no duró ni cinco minutos porque de momento no ha demostrado que sea capaz de asumir ese papel. En ese tiempo se resbaló, perdió el balón e hizo posible un contraataque de Jayson Granger, muy nervioso y errático durante el partido. En la siguiente jugada Grimau también se dejó robar otra pelota y Oriol Junyent, trotamundos del básket, no falló (16-25 a los 13'55'').

“¿Pero cómo se están regalando estos balones? Tranquilos, ya llegará nuestro momento, pero tenemos que defender bien”, exigía Pascual, que se había visto obligado a pedir tiempo muerto tras un parcial de 0-6, que amplió a 0-8 Tom Wideman, MVP de la pasada jornada, y que esta vez capturó 10 rebotes y sumó seis puntos. El Barça reaccionó con dos argumentos que no había tenido hasta entonces: buena defensa y equilibrio exterior e interior. Con Navarro e Ilyasova como protagonistas (30-34 al descanso). Un triple del propio ala-pívot turco permitió al conjunto azulgrana ponerse por delante por primera vez (35-34 a los 21'36''). Ésa fue la primera acción de un parcial de 13-2 ante el que Estudiantes supo sobreponerse gracias a Jasen y pese a sus pérdidas (cinco en el tercer período), y llegó al último cuarto con una desventaja corta (52-46). El Barça había anotado cuatro de sus ocho intentos de triple en el tercer período.

Entre Ilyasova y Fran Vázquez -otra vez espectacular y contundente a partes iguales– permitieron al Barça lograr su máxima ventaja (56-46 a 8'45''). A partir de entonces el partido, que había sido extremadamente rápido, se trabó en infracciones y tiros libres. Samo Udrih, que no acusó su inactividad (12 puntos y 2/3 en triples), el joven Carlos Suárez (seis puntos y otros tantos rebotes) y Jasen lideraron al Estudiantes, que no se descompuso ni con el 65-60 (tras un triple de Barrett, que a falta de coherencia aportó puntos, seis) y del 68-62 tras otro lanzamiento de tres de Navarro. El conjunto estudiantil pudo celebrar su segundo triunfo del curso y ganó por fin un final ajustado tras haber perdido ante DKV Joventut y CAI Zaragoza. El Barça, tras su derrota en Siena, continúa desconocido, obsesionado con unas ideas que no le funcionan.