En un vestuario con estrellas como Chambers, Gidden o Ibekwe, la ala-pívot lituana luce en un Uni Girona que sufre ante un excelente CB Al-Qáceres (71-78)
Vita Kuktiene - Foto WWW.DELFI.LT. |
Su foto no suele en las crónicas ni su nombre en los titulares. Es lo que tiene compartir vestuario con Chambers, Ibekwe, Gidden, Noemí Jordana o Anna Carbó. Tampoco es muy fotogénica, pero nada de eso le importa a Vita Kuktiene (Ukmerge, Lituania, 1980). Sabe que es una jugadora de equipo para un equipo equilibrado, talentoso y que nunca se quita el mono de trabajo como Uni Girona. Kuktiene se ha adaptado rápido al grupo y a la ciudad, y, pese a ser una anotadora, sabe esperar su momento. A simple vista puede
Kuktiene fue el recambio de Gidden, a la que tras reaparecer la semana pasada contra Cadí La Seu le falta recorrido y velocidad. Cualidades que sí tiene ahora Kuktiene, elegante y versátil. Incómoda para un CB Al-Qázeres que, como destacó Jacinto Carvajal en rueda de prensa, mejoró sus porcenatjes y fue "otro equipo mucho más alegre, un poco más intenso en defensa". Un conjunto local corajudo liderado por Dieng y Yaiza García, fundamentales para ajustar el marcador al descanso (36-37), la constancia de Vero Sánchez y el descaro de Andrea Vilaró. Ésta había colgado antes del partido una frase de la (re)conocida psicóloga Patricia Ramírez: "La esperanza saca de nosotros fuerza para seguir luchando, y nos mantiene motivados esperando que llegue el premio". El conjunto extremeño se tomó al pie de la letra esas palabras y no pareció que le separasen en ese momento nueve victorias ante un Uni Girona que supo agarrar el partido por la omnipresencia de Ibekwe, un imán para las faltas personales porque coge el rebote antes que las demás.
Los tiros libres decidieron un partido con ciertas dosis de locura, con unas visitantes que metieron un 5/7 en triples en el tercer período y 8/11 en la segunda parte. Con un CB Al-Qázeres que sólo se colapsó en los últimos segundos, una sucesión de errores de unas y otras. Incluso de Kuktiene, que perdió una pelota infantil, y a la que su club promociona en Twitter para que los aficionados la voten como mejor jugadora lituana del año. También lo ha hecho su compañera Jordana con el hashtag #vitaforpresident.
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