Laura Nicholls es como un tatuaje

España vence en un duelo colosal a Serbia (80-91) y accede a  cuartos

Nicholls, durante el Eurobásket. Foto: FIBA Europe. 

"Sí, los tatuajes hacen daño. Tienes que venir mentalizado, preparado y sin dejarte influir por los otros. Cada uno tiene su nivel de dolor, que depende de las ganas de tengan de hacerse el tatuaje. Si la persona lo pasa muy mal al principio, quizás es porque no lo tenía claro. Tienes que venir con ganas y pensar que es para siempre", reflexionaba Walter Leivas, tatuador con largo recorrido, en una entrevista para Viu El Prat. Laura Nicholls (Santander, 1989) tiene al menos dos tatuajes, un símbolo tribal en la
pierna y una frase en el antebrazo. Ante la duda, la pívot internacional aprieta los dientes, lucha por balones imposibles y explota su tiro de media distancia. Con 20 puntos (9/11 en tiros de dos) y cuatro rebotes (3 de ellos ofensivos), Nicholls se exhibió ante una Serbia que tuvo varias ventajas y que a 4m 59s sólo perdía por 76-77. Un triple de Marta Xargay y el repertorio de Nicholls, Alba Torrens (25 puntos, 8/10 en tiros libres) y Anna Cruz (15 puntos) concretaron el definitivo 80-91 y el acceso de España a los cuartos de final del Eurobásket de Hungría y Rumanía. Es la única invicta del torneo. Si gana a Rusia el lunes, la selección será primera de grupo, y si pierde, segunda. 

"¡Madre mía, Laura! ¡Madre mía, Laura!", exclamaba la ex jugadora de la selección Cindy Lima en Teledeporte: "Su partido es perfecto". Nicholls acababa de hacer su enésima acción en defensa, un tapón no señalado en la estadística. "Es una gladiadora humana", continúa Cindy Lima. 

"Es la más pachona"

"Siempre va con la cabeza alta y es la más pachona fuera de la pista. A veces se mete en berenjenales de los que no sabe cómo salir", define a Nicholls Octavio Pérez, aficionado de baloncesto femenino. La pívot santanderina creció en el Segle XXI y maduró en el Celta antes de pasar por el Hondarribia Irún y Rivas Ecópolis, al que guió hacia su único título de Liga. Jugó la temporada pasada en el Kayseri Kaski turco y acaba de fichar por el Wisla Krakow, donde volverá a coincidir con José Ignacio Hernández.   

  

A Nicholls le sobra humildad. "Más de media canasta es gracias al buen pase de Laia [Palau]", escribía en su cuenta de Twitter. Era el mensaje que introducía el vídeo de su alley-oop. Una de las jugadas más grandes de un partido impagable, con una Ndour que no se cansa de pelear, con las fintas y esprints de Anna Cruz, la finura de Petrovic (a veces demasiado sola para tirar), la clase de Milovanovic, la frustración de la desaparecida Page, la versatilidad de Alba Torrens y la contundencia de Nicholls, igual de permanente que un tatuaje. 

SERBIA 80 (27+13+22+18): Milovanovic (13), Butulija (4), Ajdukovic (4), M. Dabovic (7) y A. Dabovic (10) -quinteto inicial-; Radocaj (9), Petrovic (17), Jovanovic (12), Topuzovic y Page (4). ESPAÑA 91 (24+22+15+30): Nicholls (20), Palau (5), Torrens (25), Ndour (15) y Xargay (9) -quinteto inicial-; Domínguez (2), Cruz (15), Martínez, Gil y Romero. Árbitros: Karen Lasuik (CAN), Luca Mazzoni (ITA) y Andrei Sharapa (BIL).