Rosó Buch: "Me caracterizo por ser descarada y disfrutar en la pista"

Cronómetro de Récords entrevista a la escolta del CB Conquero

Rosó Buch, tras el partido ante Donosti Basket. Foto: Toni Delgado. 

Rosó Buch (Mataró, 1992) parece un niña jugando en el patio del colegio. Lo hace con un atrevimiento y una alegría que te remonta a la infancia, al recreo entre balones y bocadillos. En el Pabellón José Antonio Gasca de San Sebastián la escolta del CB Conquero ha debutado en una Copa de la Reina sin miedo y ante un Donosti Basket golpeado por las lesiones de Arantxa Novo, Olabarria y Bravard. Buch jugará su primera final en el torneo ante Perfumerías Avenida tras anotar sus ocho puntos en sus primeros 10m 35s. Rosó Buch

habló con Cronómetro de Récords. 

Toni Delgado / San Sebastián

—Ésta es tu primera Copa de la Reina, pero has empezado el partido como si llevases cuatro o cinco. Con mucho descaro. 

Para mí jugar una Copa es lo máximo. Tenía muchas ganas de disputarla. Una vez en la pista, es básket, lo que hago desde pequeña. Me gusta, lo disfruto y la verdad es que han salido bien las cosas. Hemos conseguido distanciarnos en el marcador. Ellas también han tenido el problema de Bravard, que se ha lesionado al principio. Supongo que eso psicológicamente les ha afectado, pero, bueno, somos un equipo fuerte que ha demostrado que se merece estar en la final. Mañana intentaremos salir y dar lo máximo. 

—Habías venido dos veces a la Copa a ver a tu amiga Mariona Ortiz. ¿Ha venido ella hoy?

Mañana vendrá. Cuando ella ganaba, y llevaba dos seguidas [con Perfumerías Avenida; ahora Ortiz juega en el CD Zamarat], yo bajaba para hacerme una foto con ella y la Copa. Mañana espero que sea ella quien baje. 

—¿Por qué crees que te has adaptado tan rápido a Conquero? En tu debut hiciste un partidazo contra Perfumerías Avenida. 

Sí, me ayuda la forma de jugar de Gabriel [Carrasco]. correr y  defender. Tenemos jugadoras muy buenas. Yo disfruto mucho con ellas porque se la pases como la pases, la meten. Sabemos cómo jugar entre nosotras. Desde el principio, tanto Gabriel como las compañeras me han ayudado mucho. Yo vine con la predisposición de adaptarme desde el minuto 1, y así ha sido. 

—Parece que hay muy buen ambiente en vuestro vestuario. 

Sí. Se me pone la piel de gallina [y por su cara, así es] cuando hablas de esto. Es una suerte que hemos tenido porque tanto jugando como fuera de la pista nos llevamos muy bien y creo que se nota cuando jugamos. Vamos segundas en la Liga y tenemos muchas opciones de ganar la Copa porque todas confiamos las unas en las otras. Ganaremos. 

—Sólo en un clima así podíais haber salido de los problemas económicos que habías tenido. Salir adelante y presentaros a la Copa. 

Lo que ha pasado nos ha hecho unirnos todavía un poco más. Todas teníamos ganas de demostrar que aquí estamos nosotras, que las cosas por mal que vayan somos profesionales. Seguimos confiando en nosotras y estamos trabajando desde siempre. Este grupo, Gabriel y el club por el esfuerzo de conseguir dinero se merecen que mañana hagamos una final digna.

—Rosó, parece que sigas en Bembibre. Tengo aquí las estadísticas y casi juegas los mismos minutos [31m 4s de media en Liga; 32m 58s el curso pasado]. Llevas tres temporadas jugando treinta y pico minutos. 

Soy afortunada. En Bembibre Chiqui [Barros] me dio mucha confianza, y Gabriel igual. Para mí tener confianza es muy importante porque así puedo jugar con descaro, como has dicho, puedo correr, no tengo miedo al fallo. Yo creo que cuando juego así, sin miedo, es cuando juego mejor. Y le agradezco mucho tanto a las compañeras como a Gabriel la confianza que me están dando. 

—¿Qué queda de aquella Rosó Buch del Platges de Mataró? [Se ríe]. ¿Qué crees que has conservado de aquella etapa?

Todo o casi todo. Desde que estaba en Mataró [su ciudad], yo me caracterizo por ser descarada y disfrutar en la pista. Espero no perderlo nunca. Esté donde esté. Sea la Copa o en el patio de casa. Hombre, seguramente estoy madurando en muchos aspectos del juego, pero conservo ese espíritu. 

—¿Hay algunas jugadoras que te haya ayudado a madurar más, que te haya puesto los pies en el suelo?

Una jugadora en concreto no, pero en Conquero sí que tengo a María Asurmendi y María Pina, que me están ayudando mucho. La verdad es que estoy sorprendida porque son muy profesionales y tienen un nombre en la Liga y cada entrenamiento me están demostrando mucho. Puede que este año esté madurando más porque el equipo es más competitivo. En todos los clubes en los que he estado he tenido la suerte de contar con jugadoras muy buenas a mi alrededor. Y mis padres siempre han estado ahí. 

—¿Tiene alguna debilidad Perfumerías Avenida?

Si de verdad podemos ser nosotras, Conquero, creo que las podremos ganar y espero que sea así. 

—Tu amigo Octavio no ha podido venir a la Copa. Mándale un mensaje. 

Octavio, gracias por tu apoyo. Siempre estás ahí, te lo agradezco mucho y aunque no estés en San Sebastián sé que estás con nosotras, sobre todo a mi lado, y te lo agradezco. Un beso.