Los escenarios más exigentes y los mejores rivales representan la prueba más real de las posibilidades de un equipo parar aspirar a un título. Configurado para ganar la Euroliga, el Barça se exhibió en Atenas ante el Panathinaikos y en Tel Aviv ante el Maccabi, y completó la proeza ganando por 63-84 al Tau en el Buesa Arena de Vitoria, en el encuentro más completo del curso. Un triunfo histórico por partida doble. Primero porque permite al conjunto azulgrana forzar un quinto y decisivo partido en el Palau para llegar a la Final Four de Berlín, y segundo, porque representa la segunda peor derrota de los locales en la competición (la primera continuará siendo un 65-94 ante el Maccabi en el sexto partido del Top 16 del curso 2001-2002). El grupo de Xavi Pascual cogió hasta 12 rebotes más que los locales (26 por 38, siete más ofensivos), recuperó 11 pelotas por 12 pérdidas (4-15 el Tau) y cinco de sus jugadores superaron los diez puntos: Jaka Lakovic (15), Gianluca Basile (13) y con 11 David Andersen, Ersan Ilyasova y… Juan Carlos Navarro, que pese a su elongación muscular en el bíceps derecho fue titular. Un riesgo que el jugador franquicia del Barça quiso tomar. La Bomba acabó siendo fundamental con tres triples en un parcial de 6-24 en el inicio del tercer cuarto. El conjunto azulgrana escribió un guión perfecto en la segunda parte.
Había avisado Lakovic de que era fundamental tener más agresividad en los primeros minutos. La advertencia pasó a ser el manual de actuación del Barça desde el primer instante y se adelantó 11-16 con Basile y Lakovic como jugadores más resolutivos. No se hizo esperar la respuesta del Tau, tan instantánea como sobrenatural: Igor Rakocevic (21 puntos) anotó tres triples en dos minutos (el serbio llevaba entonces un 4/6 desde más allá de 6’25) y los locales se distanciaron 25-19 (a los 11m33s).
El mate de Inyasova
Con Rakocevic descansando en el banquillo llegó la reacción del Barça con su peor jugador del partido anterior de la serie: Ilyasova. Su imagen fallando un mate solo acabó de hundir a un jugador al que a veces le falta más seguridad en sí mismo. Si las cosas no acaban de funcionarle el ala-pívot turco no acaba de resarcirse. Es déficit que debe trabajarse desde el club: el equipo no puede depender de lo mental y psicológico para ofrecer su mejor rendimiento. Pues bien En su primera acción Ilyasova, que acumulaba un 1/14 en tiros de campo en los dos últimos partidos, encaró el aro y machacó y poco después anotaría un triple que acercó al Barça (29-28 a los 24m29s). Con tiros libres y Tiago Splitter y Pete Mickeal el Tau intentó volver a adquirir otro renta considerable, pero los visitantes supieron no perder los nervios y fabricarse situaciones fáciles y concluir el período con dos triple y una canasta al límite del propio Ilyasova (su 11º punto, 41-40 al descanso).
Completamente entregado, el Tau no se encontrar soluciones en el inicio de la segunda parte. No le funcionaron los tiros al límite, Mirza Teletovic no lograba aparecer en los momentos precisos como suele hacer y el Barça, con tres triples de Navarro y otro de Basile, logró un parcial acumulado de 6-24 (47-59 a los 25m30s) y con un 10/20 hasta ese momento desde 6’25 (los mismos que sumando el primer y tercer partido de la serie). El balance era tan contundente, tan exagerado que el Buesa Arena apenas fue capaz de decir nada durante varios segundos.
Réplica de Andersen
Los visitantes supieron seguir jugando sin alterarse, pero con la suficiente intensidad para no ceder a su rival. Teletovic continuaba fallando triples (0/5) y Grimau, recuperando pelotas decisivas. El capitán, con dos entradas seguidas, amplió la ventaja a los 20 puntos (54-74 a falta de 6m08s). Después sobresaldría Lubos Barton, también excelente en defensa. El Barça fue superior y mereció forzar el quinto partido de la serie en el Palau. Su camino hacia la Final Four de Berlín depende de un único paso.
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