Florentino Pérez entiende que los proyectos deportivos funcionan como los cuadernos de caligrafía, que se escriben con lápiz y se borran con goma. No le importa cambiar las cosas a lo grande y pocos días después de volver a la presidencia del Madrid presentó a bombo y platillo al entrenador europeo más prestigioso, Messina, para devolver a la sección el prestigio y terreno perdido respecto a Barça y Tau. El técnico italiano siempre ha dicho que su proyecto es de varios años y que los títulos no tienen por qué ser inmediatos. Algo que no entienden así desde el club y no concuerda con la gran mayoría de fichajes, de perfil parecido, jugadores curtidos y contrastados. Jugadores ahora confundidos con sus papeles y que están al borde de despedir el curso sin trofeo alguno. Cosas de la vida, Plaza, el entrenador del anterior proyecto, puede ser el encargado de dejar a su ex equipo fuera de la Liga ACB. Está a un paso de conseguirlo después de vencer en Vistalegre con Cajasol por 60-66 en el primer partido de cuartos de los playoffs y tras dejar a su rival en nueve puntos en el último cuarto.
Plaza guió a su equipo hacia el camino que más le convenía: ataques largos, interrupciones, y defensa esforzada, virtudes a las que sumar su inusual acierto en los triples (39%, 9/23) por su 33’7% de la fase regular, cuando perdió ante el Madrid sus dos partidos por exacta diferencia: 20 puntos. Un mundo respecto a lo acontecido en Vistalegre con un Madrid pésimo en los últimos diez minutos, en los que tardó 6m 15s en anotar sus primeros dos puntos. Y lo hizo uno de sus jugadores menos más ignorados durante el curso, Bullock, que con 13 tantos fue el mejor junto a otro poco utilizado por Messina, Reyes (nueve puntos y once rebotes). Cajasol mejoró en los rechaces (su gran déficit hasta entonces, 35 por 26) y un triple de Kirksay (14 puntos) a 1m 48s ponía la máxima ventaja visitante (54-66). Esta vez no hubo ni tiempo ni criterio para otra remontada inimaginable, cuestión siempre de Llull, irreconocible a pesar de sus diez tantos, errático en los triples (1/9). Tampoco tuvo su mejor día Prigioni, con seis puntos y 2/6. Los triples resultaron el mejor síntoma del agobio y la confusión del Madrid y de la buena actuación de Cajasol con Miso como mejor director de juego y Savanovic como finalizador más destacado (19 puntos, seis rebotes para un 28 de valoración). El ala-pívot serbio debería ser un fichaje cotizado este verano.
Radenovic, clave
Más sorprendió la actuación de Radenovic (ocho puntos y tres asistencias), que empató a 41 (a los 24m 36s), a 45 (a los 26m 02s) y puso por primera vez a su equipo en ventaja por 45-47 (a los 26m 55s) después del 13-14 inicial. Un primer cuarto caracterizado por el rebote ofensivo del conjunto blanco (Tomic y Reyes) y la paciencia y desparpajo de Cajasol, además de por el libre albedrío desde más allá de 6’25 de ambos equipos (1/4 de los locales por 2/6 de los visitantes para un parcial de 16-14). El grupo de Plaza mantuvo el tipo al descanso (34-31) y en sus peor momentos sólo cedió por ocho (41-33 a los 22m 13s). Tomic cometería su tercera personal en otros tantos minutos y entre Kirksay, el citado Radenovic y Savanovic revirtieron la situación (51-53 a los 29m 18s).
Confundido y fundido, el Madrid se perdió en triples, malas decisiones y sólo meterís una canasta en juego en todo el último cuarto. Plaza puede ser el encargado de marcar el límite de este Madrid limitado. Y quién sabe si acabar con el proyecto de Messina.
Plaza guió a su equipo hacia el camino que más le convenía: ataques largos, interrupciones, y defensa esforzada, virtudes a las que sumar su inusual acierto en los triples (39%, 9/23) por su 33’7% de la fase regular, cuando perdió ante el Madrid sus dos partidos por exacta diferencia: 20 puntos. Un mundo respecto a lo acontecido en Vistalegre con un Madrid pésimo en los últimos diez minutos, en los que tardó 6m 15s en anotar sus primeros dos puntos. Y lo hizo uno de sus jugadores menos más ignorados durante el curso, Bullock, que con 13 tantos fue el mejor junto a otro poco utilizado por Messina, Reyes (nueve puntos y once rebotes). Cajasol mejoró en los rechaces (su gran déficit hasta entonces, 35 por 26) y un triple de Kirksay (14 puntos) a 1m 48s ponía la máxima ventaja visitante (54-66). Esta vez no hubo ni tiempo ni criterio para otra remontada inimaginable, cuestión siempre de Llull, irreconocible a pesar de sus diez tantos, errático en los triples (1/9). Tampoco tuvo su mejor día Prigioni, con seis puntos y 2/6. Los triples resultaron el mejor síntoma del agobio y la confusión del Madrid y de la buena actuación de Cajasol con Miso como mejor director de juego y Savanovic como finalizador más destacado (19 puntos, seis rebotes para un 28 de valoración). El ala-pívot serbio debería ser un fichaje cotizado este verano.
Radenovic, clave
Más sorprendió la actuación de Radenovic (ocho puntos y tres asistencias), que empató a 41 (a los 24m 36s), a 45 (a los 26m 02s) y puso por primera vez a su equipo en ventaja por 45-47 (a los 26m 55s) después del 13-14 inicial. Un primer cuarto caracterizado por el rebote ofensivo del conjunto blanco (Tomic y Reyes) y la paciencia y desparpajo de Cajasol, además de por el libre albedrío desde más allá de 6’25 de ambos equipos (1/4 de los locales por 2/6 de los visitantes para un parcial de 16-14). El grupo de Plaza mantuvo el tipo al descanso (34-31) y en sus peor momentos sólo cedió por ocho (41-33 a los 22m 13s). Tomic cometería su tercera personal en otros tantos minutos y entre Kirksay, el citado Radenovic y Savanovic revirtieron la situación (51-53 a los 29m 18s).
Confundido y fundido, el Madrid se perdió en triples, malas decisiones y sólo meterís una canasta en juego en todo el último cuarto. Plaza puede ser el encargado de marcar el límite de este Madrid limitado. Y quién sabe si acabar con el proyecto de Messina.
2 comentarios :
El Madrid, una vez más, ha encontrado su frustración en los éxitos del Barça. Hace tiempo que para ellos acabo la Liga... son así (y el Barça parecido en circunstancias inversas ojo!).
Plaza es un tipo excepcional, un sabio del baloncesto. Es de la nueva generación "Xavi Pasqual", creo que algo mayor. En el fondo, son "herederos" de los métodos de Messina y Aíto.
Un abrazo! Viva el Cajasol! Tenía más carga histórico-emotiva lo de viva el Caja San Fernando!
Jugaron alguna final de la ACB contra el Barça de Aito... cierto? con Turner creo recordar.
Muy buenas Fujur,
Estás en lo cierto con lo último ;) Turner era un pedazo de jugador. Plaza funcionó en su primer temporada en Madrid y después no supo gestionar el carrusel de cambios y algún que otro final como ante el Maccabi. En Sevilla está demostrando que es un buen entrenador y ha devuelto la ilusión al club después de una década sin eliminatorias por el título. Parece que ha corregido algo su actitud con los árbitros, que no le beneficiaba nada. Un saludo ya ver qué pasa hoy en el segundo partido ;)
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