La Bomba durante una acción de partido - Foto: FCB. |
En Rusia y ante el Khimki el Barça había sido un garabato vulgar, un juguete en las manos de un Planinic omnipresente (78-65). Juan Carlos Navarro (Sant Feliu de Llobregat, 1980) tuvo que ver el desastroso estreno en 2013 de su equipo desde casa y con una sinovitis en el tobillo derecho. El equipo no tenía asegurada todavía su presencia en una Copa del Rey de Vitoria que acabó ganando sin necesitar la mejor versión de Navarro, fundamental, eso sí, en semifinales contra el Caja Laboral. La Bomba vive un curso discontinuo por sus problemas físicos, aunque los azulgrana están aprendiendo a sobrevivir sin su capitán, vital en la visita al Palau del Khimki. Autor de 19 puntos, Navarro empezó y acabó con una sexta marcha para decidir un partido en el que el Barça se imaginó ganándole el basket average a su rival (58-44 a los 26m 29s) y suspiró de alivio con su victoria por 71-69, después de que los rusos, lanzados al final por Paul Davis amagasen con la remontada y no acertasen a hacer falta personal tras la canasta de Loncar a dos segundos. Antes La Bomba había metido su quinto triple –de diez intentos– y dos tiros libres a 1m 14s. Los azulgrana conservan el liderato del grupo F en el Top 16 de la Euroliga con una victoria respecto al Montepaschi.
A
punto de contabilizarse el quinto minuto de partido Navarro lanzó
por primera vez y metió su primer triple. Ése fue el gran argumento de los
azulgrana en el primer cuarto (21-16), cuando anotaron cuatro ante un
Khimki dirigido por un Planinic de más a menos (12 puntos, 4/16 en
tiros y cinco pérdidas) y que apostaba por ataques largos. Mientras que Lorbek
despuntó en un segundo cuarto en el que Tomic
sumó puntos y rebotes como las hormiguitas (acabó con 16 tantos y
cinco capturas), Jasikevicius optimizó sus minutos y Fridzon
replicó por los visitantes (44-34 al descanso).
Tomic
continuó haciendo de las suyas, yendo a la línea de personal,
procurándose canastas y estando atento para no desaprovechar las
oportunidades que generaban sus compañeros. Dos triples de Navarro y
un par de tiros libres del propio pívot croata pusieron la máxima diferencia para los
locales. Fue entonces cuando en el Khimki resurgió un pívot
fabuloso que triunfó en la Liga ACB: Paul Davis, indomable en el
epílogo, cuando los visitantes hicieron de tripas corazón
para recuperar la desventaja y se acercaron 66-63 tras su segundo
triple (2/12), el primero de Monya. Navarro replicó con otro y el
partido pasó a ser una colección de errores de ambos equipos. Aunque
ninguno como una asistencia del propio Monya que acabó en las manos de su
entrenador, Rimas
Kurtinaitis, enfurecido por la confusión. En la acción siguiente
Tomic falló una canasta, Mickeal capturó el rebote y Navarro supo
sacar la personal de Fridzon para que el Barça se asegurase el triunfo pese al arreón de Paul Davis.
BARÇA
71 (21+23+16+11): Sada
(2), Navarro (19), Mickeal (8), Lorbek (11) y Tomic (16)
–quinteto cinco inicial–, Huertas (4), Jasikevicius (4),
Wallace (2), Ingles (2), Rabaseda (0) y Jawai (3). KHIMKI
69 (16+18+14+21):
Planinic (12), Vyaltsev (0), Monya (9), Zhukanenko (2) y Augustine
(8) –quinteto inicial–, Fridzon (12), Koponen (0), Rivers (0) y
Davis (18).
Árbitros: Belosevic
(SRB), Ankarali (TUR) y Lopes (POR). Sin eliminados.
2 comentarios :
que grande la Bomba
Un jugador único. Irrepetible. Somos afortunados de poder disfrutarlo.
Publicar un comentario