Belén Arrojo: la diferencia entre el fallo y el error

“Para mí lo importante es estar bien atrás”, explica a Cronómetro de Récords la alero internacional, que rompe su racha de dos partidos sin anotar ante el CD Promete (91-71) 

Belén Arrojo, entre Gidden y Hall. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

Toni Delgado / Sant Adrià de Besòs

“A todas nos pasa y en cualquier ámbito de la vida. No es nada que nos deba preocupar. Hay buenas y malas rachas”, reflexiona Belén Arrojo (Granada, 1995) a Cronómetro de Récords. La líder del Bàsquet Femení Sant Adrià coge aire. Se la ve relajada. En los dos partidos anteriores, las derrotas contra el Gernika y el Donosti Basket, no había anotado y acumulaba un 0 de 14 en tiros de campo. En el Marina Besòs acaba de romper en mil pedazos la estadística ante el CD Promete en el Marina Besòs (91-71) con 16 puntos (2/9 en tiros de dos y 4/4 en triples y seis rebotes).

En el calentamiento Belén Arrojo se sopló los dedos. Su primer tiro, de dos, se le quedó corto, y se puso en una esquina a lanzar triples. Sí. No. No. Sí. Sí. 3/5. Se puso debajo del aro para pasarle la pelota a sus compañeras y después metió varias canastas bajo el aro. Parecía fina. “Bueno… Hay veces que antes del partido estás bien y luego no, o al revés. Influyen muchos detalles, como la defensa que te hagan”, sigue. La alero internacional salió enchufada: con cuatro puntos sin fallo en 1m 22s y tocando lo justo la pelota para que Andrea Riley la recuperase y concretara un contraataque.

El Bàsquet Femení Sant Adrià jugaba al ritmo que más le gusta, defensa generosa y posesiones cortas, ante un CD Promete sometido desde el principio que en los primeros siete minutos recibió cinco triples: dos de Riley, otros tantos de Itziar Llobet y uno de Arrojo (27-10). Adrijana Knezenic, hasta que se retiró después por una lesión en la rodilla izquierda, y Vanessa Gidden evitaron que la diferencia fuese todavía mayor. Recursos insuficientes ante un conjunto local que se fue al descanso con un claro 53-25 tras otro triple de Belén Arrojo, que ya había aportado 10 puntos, con 4 de 5 en tiros de campo.    

Desde fuera parece que Belén Arrojo viva igual un acierto que un fallo. Apenas gesticula cuando falla ni tampoco cuando la mete. Ajena a las estadísticas, está comprometida con aquello que puede controlar, como el ritmo, la intensidad o el incordio a las rivales. “Como a todas las jugadoras, me frustra fallar. Me enfado conmigo misma”. 

—Pero no te hace perder la cabeza, Belén.

—No. Para mí lo importante es estar atrás bien y aspectos como el rebote. Los tiros y las entradas siempre estarán. La falles o la metas, tienes que hacer un cambio de chip y defender lo mejor que puedas.

En su discurso se nota que ha pasado por la Blume, por el Segle XXI, y que Ramon Jordana, exdirector del centro, ha sido su mentor. Esto cuenta Mike en el libro Marta Fernández, volando con los pies en el suelo: “Tenemos que aceptar el error, aunque yo diferencio entre el fallo y el error. Tú fallas cuando te sale mal algo que no puedes controlar, como un tiro. Lo que no he consentido nunca son los errores, como no bajar al balance ofensivo”.

Belén Arrojo no comete errores. Tampoco lo hizo en los dos partidos anteriores. Como es lógico, sí comete fallos, y ante el Gernika y el Donosti Basket no anotó. “Hay jugadoras buenas y muy buenas, y ella forma parte de las privilegiadas. Sin duda, es la mejor y más talentosa del equipo. Forma parte del grupo de deportistas que pueden aparecen sin darte cuenta y solucionarte el partido. Es muy raro que lleve dos partidos tan malos en ataque. ¿Tres? Casi imposible. Siempre defiende con mucha intensidad y muy bien”, reflexionaba antes del partido Àlex Benito, comentarista del club para Canal FEB junto a Àngel Gil. Son los responsables de Zona lila, de Ràdio La Mina. “Es muy inteligente y nunca se ha ido. No metió puntos, pero aportó en muchos más detalles”, añadía Àngel Gil.  

Ricard Gómez y Nora Barros. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

“Es mi favorita. La sigo desde hace tiempo. Tiene la edad de mi hermana”, confiesa Andrea Aragón, jugadora del cadete B del Bàsquet Femení Sant Adrià. El entrenador ayudante del equipo (y primer técnico del mini blanco) es Ricard Gómez, encantado con el reconocimiento de esta semana para el club en los Premios Gigantes, con el Gigante Trabajo de Cantera: “Es un gran premio al gran esfuerzo que hace la entidad y viene de una revista de referencia”. “Es una gran noticia”, interviene Nora Barros, su pareja, y exjugadora del club “hasta cadete”.

Para desconsuelo de los aficionados visitantes, las cosas no cambian en la segunda parte. “Estoy viendo al equipo muy flojo, mal. Las jugadoras son buenas y comprometida, pero algo falla. Tienen poca seguridad en sí mismas”, lamenta Flor Armas: “Espero que puedan remontar, aunque está complicado”. Justo entonces Andrea Riley mete su tercer triple (61-30 a los 21m 29s). No se pierde un partido del CD Promete: “Al Bàsquet Femení Sant Adrià le entra todo… Soy la mamá de la 9, de Paula Estebas. La sigo a todos los partidos. ‘¡Venga, tira hija…!’”. “Las veo un poco desanimadas”, interviene Silvia García, que vive en Barcelona y ha venido por primera vez al Marina Besòs, “fácil de encontrar y de aparcar. Me ha gustado”.

Silvia García y Flor Armas, en el Marina Besòs. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

Hall y Leslie Knight maquillan el marcador para un CD Promete que llega a ceder por 36 puntos (68-32 a los 26m 3s), en parte, por los arrebatos de Arrojo. “Ha enchufado aquí dos triples seguidos [en 25 segundos, para 85-53 a falta de 6m 22s]. Pim, pam. Me gusta Belén porque es súper rápida, siempre va para hacia dentro y también tiene un buen tiro. Hace de todo”, detalla Íngrid López, responsable de @des_ing2.

“Ha sido un partido muy positivo para todo el equipo [13/27 en triples, nueve recuperaciones por 10 pérdidas, diez anotadoras diferentes, incluida Violeta Verano, de 16 años] y tenemos que seguir en esta línea en la Liga. Ahora, a equipo y afición, nos toca disfrutar del premio de la Copa de la Reina”, resuelve Belén Arrojo.

En Zaragoza el Bàsquet Femení Sant Adrià se enfrentará el viernes en cuartos de final al conjunto local, el Stadium Casablanca. A Àngel Gil y Àlex Benito, de Zona Lila, se les distinguirá rápido en la zona de prensa: irán del color del club. “Mi hermana es mi asesora y me ha dicho que con un baño de color ya tengo suficiente para los tres días”, explica Àngel Gil. Su compañero Àlex Benito tendrá que optar por un espray. “Si no queda más remedio… Si lo hace todo el mundo, lo haremos. Nos teñiremos de lila”, cede Nora Barros. “Yo no lo haré. ¡Ella, ella!”, bromea Ricard Gómez. ¿Y si se animan los dos con unas pelucas? “¡Vale!”, responden. Prometido queda. También le arranco otro compromiso a Arrojo: “Si ganamos, le pediremos al speaker del [Pabellón] Príncipe Felipe que nos la ponga”. Se refiere al hit del Marina Besòs, Te quiero más, de Fórmula Abierta.