domingo, 14 de septiembre de 2008

Vettel se convierte en Monza en el ganador de un GP más joven de la historia



Vettel celebra en el podio su primera victoria en la Fórmula 1 -EFE.

Cuando un mito se retira de la competición muchos intentan encontrar o pronosticar quién será su sucesor, determinar si hay alguien con las suficientes aptitudes para ser capaz de igualar o superar al deportista que ha marcado una época. Esa situación se produjo, por ejemplo, hace poco más de dos años, cuando Michael Schumacher, el mejor piloto de todos los tiempos, confirmó tras su triunfo Monza que se retiraba de la Fórmula 1. Entonces algunos vieron como su sucesor a Fernando Alonso, que esa temporada lograría su segundo Mundial. Otros, bastantes menos, repararon en un compatriota de Schumi: Sebastian Vettel (Heppenheim, 1987), que pese a no haber debutado en el Gran Circo no era un desconocido, sino un tercer piloto popular. En Turquía, en su primer GP como probador de BMW Sauber, Vettel había logrado el mejor tiempo en la sesión de entrenamientos. Dos días antes del anuncio de Schumacher también había sido el mejor en dos sesiones del GP de Italia. Precisamente en el circuito de Monza, con el propio heptacampeón instalado en el motor home de Ferrari, Vettel se ha convertido en el ganador de un GP más precoz de la historia, con 21años, dos meses y 11 días. Un récord que le ha arrebatado a Alonso (22 años y 26 días). El sábado el piloto alemán también le había quitado al asturiano otra marca, la de la pole más joven. “No se inquietó por nada, ni por las condiciones meteorológicas, ni por los cambios de estrategia. Estuvo absolutamente genial”, le elogió Schumacher.

El icono de la Fórmula 1 señaló a la perfección los méritos de Vettel, que en un trazado mojado, el más rápido del Mundial, no necesitó ni un adelantamiento. Sólo tuvo que superar a los doblados y eso forma parte de las reglas y no de la habilidad. Tienen que dejarle pasar. El piloto de Toro Rosso no tardó en asegurarse el podio: en la 18ª vuelta ya le sacaba 26 segundos a Felipe Massa, que rodaba cuarto. El brasileño concluiría finalmente sexto, justo por delante de Lewis Hamilton, que había partido desde la 15ª posición. El británico realizó una carrera extraordinaria y sigue liderando el campeonato, pero con tan sólo un punto de ventaja sobre Massa a falta de cuatro pruebas. También destacó Alonso, que logró una más que meritoria cuarta posición en el circuito en el que teóricamente iba a tener menos opciones. Heikki Kovalainen y Robert Kubica, segundo y tercero, respectivamente, completaron el podio.

Su debut en la Fórmula 1

“Todavía es pronto para hablar de futuro, pero tiene el potencial para llegar a lo más alto”, analizó Schumacher sobre Vettel. Ambos participaron y ganaron como equipo en la Race of Champions de 2007. El piloto de Toro Rosso también es el más joven en puntuar en el Mundial: la temporada pasada, con 19 años y 349 días, fue séptimo en el GP de EE UU. Era su debut en la Fórmula 1. El accidente de Kubica en Canadá le había daro la oportunidad de demostrar su valía, que venía de lejos: en 2003 ganó 18 de las 20 pruebas de la Fórmula BMW, 387 puntos de 400 posibles.

Más allá de la exhibición de Vettel, Hamilton y Alonso fueron los otros grandes triunfadores en Monza. El británico, tras su pésima calificación estaba a un lugar de los puntos tras las primeras quince vueltas, tras superar al límite de la legalidad a Tim Glock. Menos le había costado adelantar a Kimi Raikkonen, que acabó noveno y tiene ya 21 puntos de desventaja sobre el líder. Sin duda, el momento en el que disfrutó más Hamilton fue cuando adelantó a Alonso un par de vueltas después. Eran los peores instantes para el asturiano, que también cedió ante Glock. En el giro 30 Alonso realizó su única parada. “Tomamos la decisión acertada de poner neumáticos intermedios, fuimos los segundos en hacerlo y tuvimos suerte, a partir de ahí todo fue bien. Para mí, la pista era para intermedios, pero llamé al box para preguntar”, explicó el bicampeón. Era un riesgo importante, porque si empezaba a llover bien los accidentes eran casi inevitables. Salió bien y poco después gran parte del resto de pilotos utilizaron la misma estrategia.

Hamilton también quería ir a una sola parada, pero tuvo que pasar otra vez por boxes para cargar el alerón delantero. Su obsesión pasó a ser entonces adelantar a Massa, que pese a sus habituales indecisiones en el cuerpo a cuerpo, supo resistir. El Mundial sigue más que abierto y ya tiene a un nuevo ganador más precoz. Se llama Sebastian Vettel y cuenta con la confianza de Schumacher.


No hay comentarios :