Sin despeinarse, el piloto de Honda logra su cuarta victoria consecutiva en Jerez
Márquez celebra su primera victoria en Jerez - EFE. |
Son dos tipos que conectan con el aficionado con el mínimo gesto y que han hecho del desparpajo, la valentía y el talento pilotando sus grandes argumentos. El maestro y el aprendiz adelantado. Valentino Rossi (Urbino, Italia, 1979), el mejor piloto de todos los tiempos, y Marc Márquez (Cervera, Lleida, 1993), que sonríe mientras cambio la historia del motociclismo récord a récord, triunfo a triunfo. El de Jerez era un circuito en el que no había ganado nunca y se le daba fatal. Tampoco le inquietó que un periodista le
recordase en la rueda de prensa que desde que lo lograse Loris Capirossi 2006 nadie se había impuesto en el GP de España partiendo de la pole. Salió primero como en Catar, Austin y Termas de Río Hondo, e hizo pleno con su cuarta victoria en las primeras cuatro primeras carreras. Algo que no ocurría desde 1992, cuando lo logró Doohan, uno de los tantos mitos que han anticipado que "Marc superará a Rossi, a Giacomo Agostini, a mí... A todos". Il Dottore fue segundo y Dani Pedrosa, tercero, tras birlarle la plaza a un Jorge Lorenzo desolado el día de su 27º aniversario, pues ya está a 65 puntos del líder.
Sólo Rossi tosió a Márquez, aunque fuese en las primeras dos vueltas. “Lo he pasado bien al principio, luego ha sido aburrido”, confesó el piloto de Honda, que nunca se muerde la lengua ni se calla lo que piensa. Rossi, el ídolo de este piloto irreverente que parece no tener techo y que ha (re)enganchado a muchos aficionados a las motos, lo tiene claro: “Marc es demasiado fuerte”. Al italiano se le cae la baba hablando del que puede ser su sucesor y que hasta hace poco coleccionaba sus motos de colección. “Pensamos que habría un gran vacío el día que se fuera Rossi, pero lo ha llenado Márquez”, cierra Ángel Nieto. Mientras, a Márquez los elogios, como las críticas, le entran por un oído y le salen por otro. Sólo le interesa divertirse y ganar y ganar. Una vez tras otra. No se le ocurrió mejor manera de celebrar su 100º gran premio que sumando su 100º punto del curso. El 100% de los posibles. 28 más que su compañero Pedrosa, el eterno aspirante a la corona de MotoGP que Márquez quiere volver a ponerse.
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