El pívot de los Bulls pone lo mejor en el debut de una España discontinua ante Irán (60-90)
Pau Gasol trata de lanzar ante Haddadi y Kardoust - Foto: AFP. |
Llegará un día que los deportistas recibirán sesiones semanales de interpretación, no sólo para comunicar mejor ante la prensa, que suele ser la ventana del aficionado, sino también para resultar más naturales en los anuncios promocionales. Las marcas buscan cada vez más que sean ellos y ellas los que anuncien sus productos por los valores y éxitos que representan y porque figuran entre las personalidades más influyentes para la sociedad. Pau Gasol (Sant Boi de Llobregat, 1980), nuevo pívot de los Bulls, es uno de los grandes
reclamos publicitarios e incluso ha hecho sus pinitos como actor en las series Numb3rs, CSI: Miami y Modern Family y en la telenovela Eva Luna. Su influencia en la pista sirve para promocionar el Mundial de España. En uno de los carteles se ve un brazo tatuado con un dibujo del jugador preparándose para hacer un mate con la mano izquierda. Pau Gasol está colocado para que su mano acabe siendo la del brazo humano. "El mejor baloncesto en tus manos" reza el eslogan. Mensaje para el aficionado y reconocimiento para Pau, capital en el devenir de la selección desde su convocatoria en el Europeo de Turquía de 2001. Fue el año de su explosión y aterrizaje en la NBA. En 30 años (y alguno más) con la selección, el periodista de La Vanguardia Juan Antonio Casanova es muy directo: "Tan bien lo hizo Gasol desde el primer momento que en los momentos en el que el juego del equipo parecía atascarse se oía gritar desde la grada a Lolo Sainz, que se había convertido en director técnico '¡Bolas a Pau, bolas a Pau!' El sistema". Pau continúa siendo el gran referente y fue quien, con 33 puntos, ocho rebotes, tres tapones y dos asistencias, aportó lo mejor del debut de la selección ante una Irán combativa, pero sin suficientes recursos (60-90).
El pívot minimizó las deficiencias en el Palacio de Deportes de Granada de una España tan superior como discontinua, tan capaz de encadenar jugadas de talento y mérito como de paralizarse, perder pelotas absurdas y entregarse a la garra de Haddadi y a la lectura del base titular rival, un Kamrani cómodo ante Ricky Rubio, de nuevo más entero en la intensidad que en el tiro (1/4), pero también con Sergio Rodríguez, que tuvo una actuación más compensada, y Calderón.
Ante la baja de Ibaka y Felipe Reyes, Pau se exprimió -"he tenido un buen descanso después de la temporada en la NBA. Llevo muchos meses sin competir y me ha dado tiempo a recuperarme", dijo-, nunca bajó el pistón y tuvo acierto (12/19 en tiros de dos) desde que se estrenó con dos tiros libres. Anotó canastas de todo tipo (19 puntos al descanso, 31-48) y sólo le faltó meter su único triple intentado. Su hermano Marc tuvo más puntería en la segunda parte y ambos vieron los últimos minutos sentados en el banquillo. Aplaudieron los últimos triples, de un Rudy centado en ataque y defensa y de un Claver que hace tiempo que necesita reencontrarse y explotar, que sirvieron para mejorar la estadística desde más allá de 6'75 (7/19).
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