Laura Pardo: "El Araski apuesta por una sociedad igualitaria"

Cronómetro de Récords entrevista a la capitana del Araski en el Open Day Liga Día de Torrejón de Ardoz

Laura Pardo, capitana del Araski. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

Toni Delgado / Torrejón de Ardoz

"¡Un momento! ¡Un segundo!", se disculpa Laura Pardo (Vitoria-Gasteiz, 1989), que se une a sus compañeras para mezclarse con la afición desplazada en el Open Day Liga Día, en Torrejón de Ardoz. La capitana del Araski tiene una risa larga y campechana.
—¿Qué significa ser capitana del club de tu vida y tener una afición con ideas tan diferentes para divertirse y apoyaros? 

Pues imagínate... Es un orgullo. Hemos crecido a la par el club, el equipo, la afición, yo... Notamos mucho el apoyo de la grada. 

—¿Te habías planteado que vuestra mascota acabaría siendo una lince?

No, ha sido una sorpresa muy agradable. Creo que Katamotz motiva a personas de todas las edades. Es un personaje muy divertido que refuerza al club. 

—Made Urieta asegura que eres "la jefa" que controla que nadie en el vestuario se desfase. ¿Cómo lo consigues?

Como capitana y jugadora de casa me toca explicar un poco a las que vienen la filosofía del equipo, del club y facilitar su adaptación.  

—Tu entrenadora destaca que eres una pívot que piensa como una base. 

Siempre me ha gustado mucho leer el juego y ver las ventajas que hay en la pista.  

—En la rueda de presentación de tu renovación y de la de Izaskun García Made comentó que te falta confianza en el tiro. Hoy has lanzado bastante, sobre todo al principio, aunque no sé si con confianza o no. 

Vengo de estar un par de semanitas en el dique seco por una lesión. Me falta coger un poquito otra vez la forma. Estoy cogiendo confianza, pero los tiros esta vez no han entrado.  

—¿Cuando no tiras es porque piensas en el fallo? ¿Porque piensas que la compañera lo hará mejor? ¿Porque crees que ya llegará tu momento? ¿Es un cúmulo de todo?

Has acertado en todo. Un poquito de cada cosa. 

—Esta temporada eres jugadora a tiempo completo, profesional. 

He tenido que dejar el trabajo de ocho horas que compaginaba con el Araski para poder vivir la experiencia de disfrutar del baloncesto al 100%. 

—Hace unas semanas confesaste que tu cuerpo estaba notando las dobles sesiones y el gimnasio. ¿Ya se ha habituado un poco más o todavía no?

No, todavía no. A mi edad es difícil: nunca me había entrenado mañana y tarde. Entre eso y la lesión me está costando un poquito más. Pero, bueno, poco a poco.  

—Hay pocas entrenadoras como Made: que os hagan sentir cómodas y útiles a todas. Eso es dificíl. 

Sí, pero ella y el club tienen una filosofía muy marcada. Todas las jugadoras del equipo somos válidas y podemos aportar en cualquier momento del juego.  

—Me han dicho que Anne Aldalur y Arrate Agirre no están en el Araski porque no lo podían compaginar con el trabajo. 

Tal cual. Compaginar las dos cosas es complicado y te exige muchos sacrificios. Llegas muy cansada, no puedes entrenarte por las mañanas... Tenían una situación laboral muy comprometida y han decidido no estar en el equipo. 

—En Radio Vitoria comentaste que eres... ¡Directiva del club! 

[Sonríe]. Como te decía, llevo desde los inicios del Araski. Soy directiva en un papel, no ejerzo como tal. 

—¿Eres vocal? 

Sí. Cuando se fundó el Araski, estaba en la directiva. Ahora ya no ejerzo como tal, pero, vamos, se mantiene el papeleo. [Se ríe]. 

—¿Cómo valoras la respuesta de La Gran Liada, la grada de animación de Mendi?

Todo surgió desde la fase de ascenso a Liga Femenina de Cáceres: se movió muchísima gente. La afición crece cada más. Es una pasada y un lujo, la verdad. 

—En el crecimiento del club también tienen mucho que ver las previas o entrevistas durante los partidos en Canal FEB. Ningún otro club hace una apuesta tan fuerte en las retransmisiones como el Araski. 

El club apuesta por el baloncesto femenino, invierte porque el producto sea lo mejor posible. Es un orgullo que sea así.     

—Ya no dependéis tanto de las ayudas públicas y crece el apoyo de la empresa privada. 

RPK es una empresa muy fuerte que más que invertir en el baloncesto femenino, lo está haciendo en el proyecto del club. El Araski apuesta por una sociedad igualitaria.   

—Le contaste hace unos días a Olga Jiménez en El Correo que en el hospital no se creían que te hubiese hecho daño en el trabajo. Es un poco triste. 

Pues sí. Me costó un poco hacerle entender a la recepcionista que había tenido un percance trabajando, en un partido. Que soy una jugadora profesional. Es una anécdota que no debería suceder. 

—Imagínate que soy de la Federación Española de Baloncesto (FEB) y me tienes que convencer para que Vitoria sea sede de la Copa de la Reina. [Se ríe]. A ver qué me dices. 

Es muy sencillo: Vitoria es una ciudad que respira baloncesto. Con el Baskonia tiene una tradición enorme. Nos gusta mucho el baloncesto en la ciudad y seguro que Vitoria respondería a la perfección. 

—¿Tenéis el equipo más versátil de vuestra historia? 

Tal cual. Somos 10 jugadoras muy polivalentes, capaces de jugar casi en cualquier posición. Quizás disponemos de unas ventajas tácticas que quizás otros años no teníamos. 

—Vuestras interiores, según asegurabas hace unos días, hacen que podáis tener tiros más abiertos. 

Es verdad que tanto Umi [Diallo] como Ariel [Edwards] generan muchas ayudas interiores y abren mucho el campo. Puedo sacar partido de ello. A ver si, poco a poco, voy recuperando la confianza y entran. 

—"Me gusta aportar en todas las facetas del juego. Tampoco destaco en ninguna", comentaste hace tiempo. ¿Eso era humildad o lo creías así?

Lo mantengo. No soy una jugadora que vaya a meter muchos puntos por norma general y me gusta aportar en otras facetas del juego que creo que puedan ayudar al equipo en ciertos momentos. 

—Preparando esta entrevista y viendo vídeos tuyos pensaba, y me reafirmo, que te pareces físicamente y tienes un tono parecido al de Alba Torrens. 

¿Sí?

—¿Te lo ha dicho alguien?

¡No! Pues ya me podía parecer en el juego también. [Se ríe].