martes, 8 de octubre de 2019

Maite Cazorla: "El error te regala un aprendizaje y es una excusa para crecer"

Cronómetro de Récords entrevista a la base del Perfumerías Avenida en el Open Day Liga Femenina 

Maite Cazorla. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

Toni Delgado / Zaragoza 

Maite Cazorla (Las Palmas, 1997) es especial. Quizás lo sea porque arropa y abraza a Paula Súarez y a Inés Santibáñez, debutantes en Liga Femenina a los 16 años. O porque no hay ni un segundo de la entrevista en el que no mire al periodista a los ojos. O por su naturalidad ante tantas grandes noticias en tan poco tiempo. La nueva base del Perfumerías Avenida interrumpe una conversación con su familia para atender a Cronómetro de Récords en la entrada del CDM Siglo XXI. Maite Cazorla no responde con el piloto automático ni por casualidad.

—¿Esa herida en tu brazo derecho es del partido?
No, de un entrenamiento. 

—¿Se puede saber su autora?
Sí, Karlie Samuelson. Me metí en medio y me arañó sin querer. Hoy lo ha hecho de nuevo. Ya me estoy acostumbrando. [Risas]. 

—¿Eres tan feliz como parece?
Sí... Siempre estoy sonriendo. [Se ríe]. Desde pequeñita he sido así. 

—Has vivido muchas cosas en poco tiempo: primera española en jugar una Final Four de la NCAA, te has estrenado en la WNBA con las Atlanta Dream, te ha fichado el Perfumerías Avenida... ¿Eres capaz de digerir la película?
Ha pasado todo tan rápido que no he podido asimilarlo todavía. Ahora estoy empezando a hacerlo.  

—¿Por qué aceptaste la propuesta del Perfumerías Avenida? 
Siempre ha sido un referente de la Liga Femenina y era una de las mejores opciones que tenía. Quería poder contar con  minutos para seguir creciendo y sé que si trabajo mucho puedo tenerlos en el Perfumerías.   

—Hasta ahora nunca habías pisado Würzburg.  
Sólo lo había visto por la tele y siempre lleno. Impresiona. Tengo muchas ganas de jugar allí [lo hará este miércoles ante el CB Bembibre].  

—¿Qué te transmite Würzburg vacío?
Pienso en las jugadoras que han pasado por ahí, en el club y su espíritu ganador... 

—Pau Gasol te ha felicitado por tus logros y has colaborado junto con Amaya Valdemoro en el NBA 2K20... ¿Cómo llevas eso?
Es increíble. ¿Sabes qué siento? ¡Ilusión! Jugar unos contra uno con Amaya Valdemoro para colaborar en un juego fue un sueño. De pequeñita la veía en la selección... Y ahora la tenía al lado... Me impresionó que Pau Gasol me felicitase. No me lo esperaba. Estoy muy agradecida tanto a Amaya como a Pau.    

—En la Supercopa te tocó tratar de parar a la mejor base europea... "'Ostras, estoy defendiendo a Laia Palau. De primera impresión te cuesta asimilarlo", le contaste a Pablo Romero en la web de la FEB. Entiendo que antes del partido o justo cuando saliste desconectaste tres segundos y te preguntaste: "¿Dónde estoy?". 
Claro. Lo pensé. ¡Iba a defender a Laia Palau! Después de disfrutar tanto de su juego iba a tener la oportunidad... ¡De enfrentarme a ella! Y ya me centré en el partido. 

—En directo te vi muy tranquila. No parecías una debutante. [Se ríe]. "Tiene un desparpajo, una seguridad y una seriedad brutales para su edad", asegura Germán Rubio, vuestro jefe de prensa. Transmites una experiencia que, por años, no tienes. 
Creo que siempre he sido así. En la pista siempre me he mostrado calmada. Los nervios son inevitables, pero no creo que sean malos. Me gusta transmitir calma al equipo. 

—En el Perfumerías Avenida creen tanto en ti que en la primera lista de fichajes para el curso 2019-2020 ya estabas, aunque en ese momento no te podían contactar todavía...
Es un voto de confianza impresionante. Sólo me sale una palabra: gracias. Quiero devolverles esa fe en mí dejándome la piel en la pista. 
  
—"Maite Cazorla será la base del futuro de la selección española. Es una apuesta segura", anticipa Jorge Recio, tu presidente.  
¡Me encantaría...! [Sonríe]. He disfrutado mucho jugando con las selecciones inferiores, desde la sub 13 a la sub 20, y sería un sueño llegar a la absoluta.  

—¿Cómo trabajas la confianza? 
Siendo positiva siempre. ¿Que un día te pasa algo malo o no te entran los tiros? Respira y enfócate en lo positivo y no en lo negativo, que contaminará al resto. 

—¿Aparcas rápido el error? 
Lo intento. El error te regala un aprendizaje y es una excusa para crecer. 

—¿Y cómo ayudas a una compañera que le dé muchas vueltas a las cosas?
A veces yo también me como la cabeza, eh. [Risas]. Hablo con mi compañera e intento transmitirle confianza: "Eh, que sé de qué eres capaz".  

—Al principio te costó con el inglés. 
Muchísimo...

—¿Cómo te soltaste? 
Contestaba a partir de lo que había entendido, que muchas veces no se parecía a lo que me habían dicho. Al cabo de dos o tres meses había progresado mucho y lo pillaba más. Poco a poco dejé de pensar en español y de hacer la traducción simultánea. No es un buen método... Hay muchas palabras o frases hechas que no tienen traducción o que no se entienden.  

—¿Qué se te movió por dentro en tu debut en la WNBA?
Estaba nerviosa y contenta... [Se ríe]. Sabía que no todo el mundo tenía esa oportunidad y que se trataba de aprovecharla y disfrutarla.  

—"Difícilmente verás montar un numerito o hacer según qué declaraciones a una jugadora que haya salido de la Blume", defiende Ramon Jordana, exdirector del Segle XXI. ¿Qué valores aprendiste allí? 
Estuve tres años con Ramon Jordana. Te enseñan valores en la pista que te influyen en la vida cotidiana. Como el compañerismo, por ejemplo.  

—"Perderé la relación directa con la familia y los amigos, pero es un paso muy importante para mí", declaraste a Canarias 7 con 14 años y antes de irte al Segle XXI. Es tenerlo claro no, lo siguiente. 
Lo hablé mucho con mi familia, que me comentó que siempre podía volver si no estaba a gusto. Fui a por todas, igual que a Estados Unidos, que implicaba un cambio de país, idioma, horarios, cultura... En el Segle XXI Ramon Jordana, Iván Torinos y Sílvia Font me ayudaron muchísimo a crecer como jugadora. 

—En la Blume son 24 horas de convivencia. ¿Qué descubriste de ti misma y de quién te hiciste más amiga?
Maduré mucho. Desde los 14 años Ramon Jordana me hizo subir con jugadoras tres años más mayores que yo. Pasaba mucho más tiempo entrenándome con las veteranas: Belén Arrojo, Ana Carlota Faussurier,  Laura Aliaga, Irene Garí... Al final era con quienes más convivía. Luego también lo hacía con las de mi edad: Laia Raventós, Clara  Clé, Marta Gómez, Maria Martiáñez, Irene Garrido... Te tienes que llevar bien con todas. 

—¿Lloraste mucho los primeros meses en el Segle XXI? 
Sí. Echaba mucho de menos a mi familia, pero todo el mundo pasaba por lo mismo. Nos ayudábamos mucho las unas a las otras. 

—¿Llamabas mucho a José Manuel e Inmaculada? 
Bueno... A mis padres los llamo incluso ahora. Con mi madre hablo casi cada día. 

—¿Te ha ayudado que tus hermanos Juan Pedro y Carlos fueran jugadores profesionales? 
Mucho. Me dan dado consejos y, como tiene que ser, me han metido caña. [Risas]. En general, me dicen que disfrute. Al final, el baloncesto no me va a durar toda la vida. ¡Ya me gustaría a mí!  

—¿Sueles estar de acuerdo con lo que te dicen?
Sí. A lo mejor no me gusta, pero tienen razón. 

—"Estoy convencido de que Maite es una jugadora que va a crear tendencia en nuestro baloncesto. Su capacidad de aprendizaje, actitud y compromiso activo en la mejora personal son su mejor aliado", expone Iván Torinos, exdirector del Segle XXI y que ahora está en el Toyota Antelopes. 
(Risas). A Iván lo tuve como asistente tres años y luego como primer entrenador. Es un pedazo de técnico. Le quiero mucho. 

—Iván Torinos exige y se exige mucho, se pone en la piel del resto, utiliza muy bien el tono... 
Sí. Sabe con quién puede subir un poco más el tono y con quién no. 

—¿A ti te lo subía un poco o no?
[Risas]. A mí... A ver, cuando tenía que hacerlo lo hacía, pero me hablaba normal. Era consciente de que así ya le haría caso, aunque si me tenía que dar caña, lo hacía. 

—¿En qué te fijas más de Silvia Domínguez?
Buff... ¡Es un pedazo de jugadora! Va súper rápida después de un bloqueo, te da un pase así de espaldas, picado... Sobre todo me fascina su visión de juego.

—"Con Maite Cazorla siempre trabajas pensando en lo que puede llegar a ser, no en lo que es actualmente. Prácticamente no baja el balón y su ejecución es muy rápida", apunta Iván Torinos. 
Cuando juego analizo todas las opciones: si puede ser para mí, para la pívot que continúa, en la esquina... La mecánica de tiro se trabaja: es volumen y confianza. Intento lanzar antes o después de los entrenamientos, aunque sea sólo media hora. 

—¿En el Segle XXI te cambiaron la mecánica de tiro? En alguna época lo hacían y a algunas jugadoras les perjudicó. 
Creo que me ayudaron. Quizás no me la cambiaron tanto. No recuerdo qué consejos me dieron sobre la mecánica de tiro. Ahora diría que lanzo más rápido tras mi paso por Estados Unidos.  

—En las Atlanta Dream has coincidido con Brittney Sykes. ¿Qué le espera a la afición del Uni Girona? 
Es una gran jugadora. Sykes lo va a hacer muy bien en Liga Femenina, aunque espero que no contra nosotras. [Risas]. ¡Me la quiero un montón! Puede tirar, pasar, es buena penetrando... Hace de todo.  

—En el Perfumerías Avenida vuelves a coincidir con Tiffany Hayes.  
Es una jugadoraza. Me impresiona su rapidez, cómo deja clavada a la defensora y va a canasta... A veces Hayes se mete en un espacio tan pequeño... ¿Cómo lo hace? 

Enlaces relacionados 


No hay comentarios :