Llull celebra un triple durante el partido - realmadrid.com. |
En el Palacio de los
Deportes se vivió un anuncio en directo de dos cuartos de duración
y sin tomas falsas. El vídeo, bien editado o incluso sin editar,
podría servir para que el baloncesto gane más adeptos a la causa un
domingo a última hora por la tarde o en cualquier momento. Resultó
una primera parte jugada a cuerpo abierto y sin matices, con dos
equipos descarados como el Madrid y el Estudiantes, que por algo son
los dos que más anotan de la Liga ACB. Llull empezó a iluminar el
158º derbi con dos triples en dos minutos. Todo pasaba muy rápido
en un partido delicioso. English y Germán Gabriel estaban inspirados
para perpetrar un parcial de 18-5 (18-10 a los 6m 45s) y Laso
encontraba soluciones en su banquillo, cambiando a Mirotic y
Hettsheimeir –extra desenfocado esta vez– por Begic y Reyes. El
Estudiantes bajó enteros mientras descansaban English y Germán
Gabriel y reaccionó de nuevo con ellos en pista. Gabriel se marcó
tres triples desde el mismo sitio y puso en jaque a un Madrid que
llegó a los vestuarios 52-58 por delante y que anotando mucho menos
y defendiendo mejor en la segunda parte supo sentenciar bajo el mando
de Llull (15 puntos, 5/8 en triples) y las pinceladas de Rudy (17).
El alero mallorquín, duda por sus dolores en la espalda, puso la guinda a un partido en el que el Estudiantes acusó el bajón de su pareja de moda, English y Germán Gabriel, tras el paso de los vestuarios, pues
contabilizaron sólo seis puntos de los 40 que sumaron en total.
Vidorreta no pudo sacar
el mismo provecho de su banquillo, que aportó 19 puntos por los 40
de un Madrid con más fondo de armario y que contabiliza once
victorias en once partidos en la Liga ACB y dispone de una renta de
tres partidos con respecto a sus perseguidores: por este orden, Caja
Laboral, Valencia Basket, Gran Canaria y Bilbao Basket. El Barça
está a cuatro de un conjunto blanco que se plantea el baloncesto
como un juego eléctrico sin tregua y que este curso ha alcanzado dos
veces la cifra de 100 tantos en el torneo. Excedente de la plantilla
más completa del torneo y con la mejor línea exterior de Europa,
por más que Carroll tenga menos focos. Esta vez el tirador
canadiense trabajó a destajo para igualar su número de puntos con
los rebotes (seis). Es un trueno como Llull, que dirigía a su son al
Madrid, bien dirigido también por Sergio Rodríguez, mientras que en
el Estudiantes Granger no era el habitual y tuvo que descansar pronto
por acumular personales. El base de Montevideo estuvo impreciso y
apenas dejó destellos, el mejor un dribling ante el propio Carroll.
La jugada de Granger puso
el 66-74 a 6m 14s, pero el Estudiantes, a pesar del gran partido de Kirksay (seis puntos, nueve rebotes y cinco asistencias), no llegó a rebajar más la
distancia, que había llegado a ser de 14 (56-70 a los 25m 45s) tras
el penúltimo triple de Llull. Gabriel y English aportaron dos
canastas más y Rudy explotó en el tramo final. Un fogonazo como el
de Mirotic, que antes había respondido al mensaje de la Demencia,
que le cantó “¡Ibaka! ¡Ibaka!” para recordarle la identidad de quien le ha impedido llegar a competir con
la selección española. Pero el protagonista fue Llull, que impuso
su ley en el derbi.
ASEFA ESTUDIANTES 74
(21+31+12+10): Granger (9), English (16), Kirksay (6), Gabriel
(24) y Barnes (0) –quinteto inicial–, Fernández (2), Kuric (5),
Fisher (0), Clark (5) y Nogueira (7). REAL MADRID 87
(23+35+14+15): Llull (15), Rudy (17), Suárez (1), Mirotic (14)
y Hettsheimeir (0) –quinteto inicial–, Reyes (8), Slaughter (4),
Sergio Rodríguez (9), Pocius (0), Draper (4), Carroll (6) y Begic
(9).
2 comentarios :
grande el Madrid y muy grande Gabriel, la primera mitad prometia más puntos.
La mejor primera parte que he visto desde la final de Londres. Germán Gabriel ha estado espléndido entonces. El más regular y el jugador clase fue Llull. Un saludo, Jairo.
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